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viernes | 19 abril | 2024
El Gobierno sostiene que, a cuatro años de las próximas elecciones municipales, “ahora es el momento” de plantear la reforma electoral local, mientras que el PSOE es partidario de un “debate en profundidad hablando de todos los temas después de las elecciones generales”.
El resto de grupos de la oposición en el Congreso critican que el PP vaya a presentar esta semana en el Parlamento su propuesta de reforma electoral local, a excepción de CDC –que ha apoyado especialmente la segunda vuelta–, mientras que el portavoz popular Rafael Hernando garantizó que no impondrá su mayoría absoluta.
La posición del Gobierno la ha expresado ayer la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría, que dijo que este es un “buen momento” para plantear este asunto y defendió la pertinencia de la propuesta del PP de establecer en las municipales una prima mayoritaria en el caso de que se consiga un porcentaje de votos superior al 35% y, si no, una segunda vuelta.
En una entrevista en Cuatro, la vicepresidenta rechazó que el PP pretenda así lograr lo que no consigue en las urnas al afirmar que “si hubiera sido así, se hubiera planteado antes de las elecciones” y defendió la propuesta en aras de la “estabilidad”.
Los socialistas, que evitan entrar en el contenido de la propuesta, insisten en que no les parece el momento oportuno de debatirla, a pocos meses de las generales.
Desde el Gobierno vasco, su portavoz, Josu Erkoreka, señaló que “no se cierra” a una reforma del sistema electoral, pero exigió el “máximo consenso”, porque este tipo de cambios “no se puedan aprobar unilateralmente sobre mayorías coyunturales”.
En la misma línea, el portavoz del PNV en el Congreso, Aitor Esteban, advirtió al PP de que le parecería “inadmisible” que intentara sacar adelante solo con sus votos esta reforma y ha coincidido con el PSOE en que habría que “esperar al principio de la legislatura” que viene.
El rechazo frontal a la iniciativa vino del portavoz de la Izquierda Plural, José Luis Centella, que acusó al PP de intentar “trucar” con ingeniería electoral el mandato de los votantes y querer dejar todo atado “diez minutos antes de irse”, al igual que Rafael Larreina (Amaiur), que pidió a los ‘populares’ que “abandonen la idea de utilizar la ingeniería electoral para hacer trampas a la democracia”.
Por su parte, Rosa Díez afirmó que el PP, con su propuesta de reforma electoral, demuestra que “una vez más” está “preocupado por lo suyo y no por los problemas de España”.
