El vicepresidente del Govern, Pere Aragonés, negó ayer toda credibilidad a las “conjeturas” que contiene la investigación de la Guardia Civil sobre 21 personas relacionadas con el procés y que da verosimilitud a un hipotético envío de tropas rusas para apoyar al independentismo catalán.
En concreto, el juez que investiga el desvío de fondos públicos para costear los gastos de Carles Puigdemont en Waterloo sospecha que, días antes de la declaración unilateral de independencia de octubre de 2017, Rusia ofreció trasladar a Cataluña a 10.000 soldados.
Esta hipótesis recogida por el juez, según Aragonés, resta toda “credibilidad a las conjeturas que hace esta investigación”.
Los autos del juez, según el vicepresidente del Govern, “no indican ninguna irregularidad, son meras conjeturas”, y “ya hemos visto muchas veces cómo hacen un gran espectáculo policial que acaba en nada”.
“Estamos cansados de intervenciones judiciales que a partir de escuchas fragmentadas intentan construir un relato falso”, denunció Aragonés, que expresó “toda la confianza del Govern en los trabajadores públicos involucrados” en la investigación.
Las escuchas telefónicas a los tres empresarios miembros del llamado “estado mayor” del 1-O revelan, según el juez, que seguían manteniendo su influencia política y sus contactos en el Govern, que presuntamente utilizaban para beneficiar sus negocios y repartirse fondos públicos “arbitrariamente”.
El ex alto cargo David Madí, el exconseller de ERC Xavier Vendrell y el empresario de la comunicación Oriol Soler, los tres principales detenidos ayer en la operación “Volhov”, permanecen en la comandancia de la Guardia Civil, a la espera de pasar a disposición del titular del juzgado de instrucción número 1 de Barcelona, Joaquín Aguirre, que dirige las pesquisas. Los tres empresarios, junto al historiador Joan Josep Alay y otras 17 personas, fueron detenidos en el marco de la causa
Las sospechas de la injerencia rusa, que Moscú negó ayer con contundencia, derivan de una grabación intervenida al exdirigente de CDC Víctor Terradellas en la que este aseguraba que, tres días antes de la DUI, el jefe de un “grupo ruso” con el que había contactado ofreció a Puigdemont “contar con 10.000 soldados y pagar toda la deuda catalana”. l