Pedro Sánchez: “El marco de la Constitución puede dar respuesta a la crisis territorial”

Pedro Sánchez: “El marco de la Constitución puede dar respuesta a la crisis territorial”
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, asiste al acto de Conmemoración del Día de la Constitución en el Congreso de los Diputados, en Madrid (España) a 6 de diciembre de 2019. 06 diciembre 2019, Política, Cong

El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, subrayó ayer que el marco constitucional actual cuenta con las herramientas para solucionar los “conflictos sociales y políticos” del país y para afrontar también la “crisis política y territorial” de Cataluña.

En su intervención ante los medios de comunicación antes de la celebración del aniversario de la Constitución, Sánchez indicó también que ayer era un buen momento para reivindicar y defender el “pacto entre diferentes” que se necesita para garantizar la gobernabilidad.

Sánchez consideró que el texto constitucional de 1978 es un instrumento “fundamental” para resolver las crisis territoriales y políticas que se pueden tener, y subrayó que hay “una mancha” que vemos a diario en los medios de comunicación, que es “la de Cataluña”. El orden constitucional, añadió, “creó el marco del Estado de las autonomías” y al mismo tiempo debe servir para “resolver” las citadas crisis.

Y además de aprovechar la Constitución para afrontar esos “conflictos políticos”, Sánchez apeló a la Carta Magna para tratar de resolver otras crisis como la demográfica, con la despoblación de numerosas zonas del país.

Fortaleza
El jefe del Ejecutivo en funciones señaló que la de ayer era una jornada de “reivindicación y fortaleza de todo lo que representa la Constitución”.

Pero también, en este momento de negociaciones para investidura, y cuando los socialistas tratan de llegar a un acuerdo con ERC que la permita, consideró necesario hacer una “reflexión”, la de que “el encuentro, el diálogo, el acuerdo, el pacto entre diferentes” es algo que hay que “reivindicar hoy más que nunca” para “dar solución a la crisis de gobernabilidad”. Así, tras dos elecciones generales llamó a la “responsabilidad, generosidad y entendimiento” y al “acuerdo entre diferentes”. 

Sánchez también recalcó que es importante reivindicar derechos como el de la igualdad real entre hombres y mujeres e insistió en la “lucha sin cuartel contra la violencia que sufre la mitad de la población por el mero hecho de ser mujeres”. También destacó otros derechos como los de tener un trabajo digno, vivienda digna, pensión digna o una sanidad y una educación de calidad.

Clave para el Gobierno
Los socialistas, que tienen abiertas las negociaciones para la investidura, dijeron ayer que defender la Constitución equivale a “facilitar la formación de Gobierno, “la clave de bóveda del sistema política que establece la Constitución de 1978”. Así lo puso de manifiesto el secretario general del grupo en el Congreso, Rafael Simancas, quien también puso en valor la vocación “unificadora” de la Carta Magna frente a los “ultraradicales” que atacan algunos de sus valores y los “sectarios” que la usan como “arma arrojadiza”.

Simancas sostiene que “todos” tienen la responsabilidad de permitir la conformación del Gobierno que “necesita y merece” el país. “Lo tiene el PSOE, pero también aquéllos que están en condiciones de facilitar y apoyar la investidura y aquéllos, que no siendo alternativa, están llamados a no obstaculizarla”, añadió.

Responsabilidad
Por ello, el socialista madrileño animó a todos los grupos políticos a que ejerzan esa responsabilidad facilitando la investidura porque, según apuntó, unas terceras elecciones supondrían “no ya una crisis en la democracia, sino una crisis de la propia democracia constitucional”.

Preguntado sobre si espera que haya investidura antes de Navidad, Simancas respondió que el PSOE quiere que ese Ejecutivo se conforme “cuanto antes” porque al país le interesa tener un Gobierno “en plenas funciones”. “Pero no depende solo de nosotros”, apostilló.

Por otra parte, la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, defendió el papel de la política para “mantener un proyecto común de futuro” que “amplíe” “su capacidad integradora”.

Advirtió de que “si las palabras” de la Constitución de 1978 “no encuentran un soporte en la vida social y política, si nos perdemos el respeto, si entre nosotros crece la desconfianza y traicionamos nuestra solidaridad, estamos dilapidando ese legado”. Y fue más allá cuando hizo hincapié en la “eficacia integradora” que se atribuye a las normas fundamentales, proclamando que “quien defiende la Constitución debe esforzarse en integrar en ella y sus valores a quienes se puedan sentir alejados o excluidos”.

“Integrar, incluir y cohesionar a la sociedad en torno a unas garantías es lo que da sentido a la Constitución”, dijo.

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