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viernes | 19 abril | 2024
Ana Milán y Fernando Guillén Cuervo estrenan mañana en Santander "Hoy: El Diario de Adán y Eva", de Mark Twain, montaje propuesto por esta pareja a Blanca Oteyza y Miguel Ángel Solá, anteriores protagonistas de la obra, que les han cedido los derechos y han versionado el texto junto a Manuel González Gil.
Este proyecto, ha explicado Milán en conferencia de prensa, surgió "en un taxi a la vuelta de un París nevado", al que la pareja había viajado para celebrar el cincuenta cumpleaños de Guillén Cuervo.
La idea fue bien recibida por Oteyza y Solá, quienes eran pareja en la vida real cuando protagonizaron la obra, al igual que Milán y Guillén Cuervo lo son ahora. Así, les cedieron los derechos, que antes le habían negado a otros, "pese a tener ofertas de todo el mundo", explica la actriz.
El proyecto se puso en marcha y se produjo, según apunta Guillén Cuervo, una "alineación de astros" para hacer posible que esta pareja interprete "el texto teatral más bonito" que ha tenido en sus manos.
Guillén Cuervo ha explicado que una "condición sine qua non" que plantearon para esta adaptación fue que Solá dirigiera la obra, porque otra cosa hubiera sido, a juicio del actor, una "usurpación".
Además ha agradecido a Solá que haya hecho posible que la obra "mute a otro estado" y que otra generación pueda disfrutar de un texto que "se entiende desde la emoción y el corazón".
Pero, sobre todo, ha valorado la "gran calidad humana" del actor argentino por la "generosidad" con la que le ha "legado" el personaje, sin caer en la "tentación" de indicarle cómo debía interpretarlo.
Milán y Guillén Cuervo han coincido en que para ellos es un "privilegio" retomar de la mano de Solá, "Hoy: El diario de Adán y Eva", no sólo por el éxito alcanzado por esta obra en su anterior etapa, sino por "el estado emocional que se alcanza".
Mientras, la actriz reconoce no haber visto la versión anterior por coincidir con su trabajo en "5 mujeres.com", Guillén Cuervo señala que, como "hombre de teatro", presenciar la obra protagonizada por Oteyza y Solá, fue "una de las experiencias más importantes" de su vida como espectador.
En cuanto al hecho de ser pareja en la vida real, Guillén Cuervo y Milán reconocen que la obra les aporta muchas emociones que facilitan su convivencia; pero, sobre todo, sostienen que estar enamorados es una ventaja para su trabajo de interpretación.
"Adoro a Luis Tosar, a Eduardo Noriega y a Javier Bardem, pero no podría hacer la obra con ellos sin estar enamorada", resume Milán, porque, como añade Guillén Cuervo, "hay mucha emoción privada que ayuda a la función".
Y es que, como no se cansan de repetir, la obra es un "evangelio de amor", a la que tratan de aportar "ganas, energías, riesgo, emociones y apuesta".
La nueva versión protagonizada por Milán y Guillén Cuervo, que vienen de compartir escenario en "Wilt", se diferencia de la anterior, principalmente, en que la acción transcurre en España y no entre Uruguay y Argentina (una década más tarde).
Los actores también han defendido la vigencia de la obra escrita por Mark Twain, porque "habla del amor como motor de la vida", por lo que "más que una función de teatro, es un mensaje al corazón".
Milán y Guillén Cuervo aparecen en la obra "vestidos de gala" y no con los "taparrabos" con los que uno se imagina a Adán y Eva, porque, según precisan, en la obra se rinde homenaje a los actores de teatro radiofónico.
Los protagonistas son dos actores de aquellos, que "usaban la voz como un instrumento de gran pureza", señala Guillén Cuervo, que viven su última noche de radio porque el teatro desaparece de las ondas.
