Los incendios forestales en Galicia dejan un balance de 53 imputados

Los incendios forestales en Galicia dejan un balance  de 53 imputados

Siete personas, todos ellos varones, han sido imputados por la Policía Autonómica como presuntos autores de cinco incendios forestales en los municipios coruñeses de Frades, Santiago, Curtis y Ferrol, y en el lucense de Castroverde, informó la Xunta en un comunicado.

Además, agentes del puesto de la Guardia Civil de Viana do Bolo imputaron a dos vecinos de esta localidad ourensana, un hombre y una mujer, de 33 y 32 años, como presuntos autores de un delito de incendio forestal ocurrido en Viana do Bolo y que se extendió a la provincia de Zamora. Con estos nueve últimos casos, ya son 53 las personas imputadas por los agentes por delitos relacionados con los incendios forestales.

Agentes de la Policía Autonómica de la central de Santiago procedieron a la imputación de un hombre como presunto autor de un incendio forestal en Frades y de otros dos por un fuego en Santiago.

El incendio de Frades tuvo lugar el pasado día 4 en la parroquia de Moar y afectó a una superficie de 20.100 metros cuadrados de monte raso. 

Al parecer, el incendio se originó por una negligencia en la realización de tareas de segado, se indica en la nota oficial.

Por su parte, el incendio ocurrido en el municipio de Santiago tuvo lugar el pasado día 8, a raíz de una quema imprudente de residuos. El fuego arrasó una superficie de 1.700 metros cuadrados de monte raso.

En ambas actuaciones, como es habitual, los agentes contaron con la colaboración de la Brigada de Investigación de Incendios Forestales de la Consellería de Medio Rural e do Mar.

Además, la Jefatura de la Policía Autonómica de A Coruña imputó a otras tres personas como presuntos autores de dos incendios forestales, una por un incendio en Curtis y las otras dos por un fuego en Ferrol.

El incendio de Curtis se originó en a parroquia de Culleredo el pasado 31 de julio y arrasó una superficie de 3.000 metros cuadrados de monte raso, debido a una negligencia al realizar un desbroce con un tractor. El 27 de julio la parroquia de Esmelle, término municipal de Ferrol, registró un incendio que tuvo lugar a causa de una tala al caer uno de los árboles en la línea eléctrica, lo que provocó el fuego. Por este incendio están imputados dos varones.

Por último, la Policía Autonómica de Lugo informó de la imputación de un hombre como presunto responsable de un incendio forestal registrado el día 10 de este mes en la parroquia de Paderne, en Castroverde.

El incendio arrasó una superficie de 20.000 metros cuadrados de monte raso como consecuencia de la realización de labores de desbroce con un tractor. 

Por otro lado, el incendio que se inició de forma presuntamente intencionada con cinco focos de origen en la parroquia de Pradorramisquedo, en Viana do Bolo, limítrofe con la localidad zamorana de Barjacoba, calcinó 294,5 hectáreas en terreno protegido por Red Natura en Galicia. Debido a la dimensión del incendio y al peligro que supuso para la población y las casas, la Guardia Civil y los servicios de la lucha contra incendios de la Xunta tuvieron que desplegar un importante dispositivo humano y de medios.

Mientras tanto, la Guardia Civil prosigue con las gestiones para identificar a los sospechosos de otros incendios registrados en los últimos días en la provincia de Ourense y que provocaron la “alarma social” entre la población afectada. 

Por otro lado, la Consellería do Medio Rural e do Mar informó de la extinción de un incendio forestal registrado en el municipio ourensano de Oímbra, parroquia de A Granxa. El fuego se inició a las 23.04 horas del miércoles y quedó extinguido a las 17.50 horas de ayer.

Medio Rural dio ayer por extinguidos los dos únicos incendios superiores a 20 hectáreas que permanecían activos, aunque controlados. Se trata de los fuegos de Castro de Beiro, Ourense, que quedó extinguido a las 9.08 horas de la mañana tras quemar 30 hectáreas, y de A Merca, en el misma provincia.

Por otro lado, un incendio ocurrido en la madrugada de ayer en Melón (Ourense) arrasó dos naves de una granja en la que fallecieron 32.400 pollos que se criaban en el interior, por causas que todavía se desconocen. Además, el fuego calcinó un tractor y un camión, los cuales se vieron afectados por las llamas.

Finalmente el incendio se pudo controlar y no hubo que lamentar otras desgracias, ya que en las proximidades había una gasolinera y una fábrica de madera, que podrían haberse visto afectadas.

Los incendios forestales en Galicia dejan un balance de 53 imputados

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