La iglesia parroquial de Santa Baia en Boiro dio cabida el pasado viernes, tras la celebración de la eucaristía del Día de Reyes, a una escenificación de un belén viviente que, al igual que sucedió esa misma jornada en la parroquia rianxeira de Taragoña, contó con la participación de un total de 15 niños de la catequesis, así como de sus padres y de los catequistas. Los asistentes a ese evento expresaron su agradecimiento a los chiquillos y a los mayores por su implicación en estas celebraciones y por mantener vivo el espíritu de la Navidad. De igual modo, también manifestaron su deseo de que este tipo de actos se conviertan en una tradición por estas fechas y que perduren año tras año.