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jueves | 25 abril | 2024
La expectación generada era máxima. No todos los días se ve a Melchor, Gaspar y Baltasar. Y menos bajándose de un helicóptero. El Concello de Vilanova lo trabajó este año para crear ilusión entre los más pequeños y la multitud concentrada en el parque de O Cabo para ver el aterrizaje vibró con el asombro de los niños al ver bajar del cielo a sus ídolos, cargados de regalos. Allí mismo hicieron entrega de los primeros.
Comenzaba así, hacia las cuatro y media de la tarde, un largo e intenso peregrinaje de los magos de Oriente por toda la comarca. De ahí se fueron en autobús clásico por las parroquias de Vilanova, para luego salir en desfile de carrozas por el centro urbano y acabar en una fiesta en el multiusos, con exhibiciones de patinaje, Belén viviente, animación y más regalos.
También se fueron a A Illa, para recorrerla a caballo, como hacía ya bastantes años que no se recordaba en el municipio insular. La fiesta los llevó hacia la iglesia y luego al Auditorio, donde siguió el espectáculo.
No faltaron tampoco a su cita a Sanxenxo, donde se inmortalizaron frente a las oficinas municipales.
En Cambados la afluencia fue multitudinaria y el ambiente muy mágico ya caída la noche en Fefiñáns, con la plaza abarrotada pero con algunos comercios cerrados y con carteles en protesta por su peatonalización. Sorprendió un roscón gigante que fue blanco de un buen número de miradas y los Mercedes clásicos con los que fueron recibidos en la localidad.
En la villa del Albariño y también en Ribadumia el protagonismo de los reyes magos se compartió con algunos personajes de animación, como los de Frozen, que llegaron ayer a la tierra del tinto de Barrantes para mayor emoción de los niños.
En Meaño y alrededores sus majestades de Oriente tuvieron que emplearse a fondo para atender a sus varias cabalgatas, las más concurridas, en Dena y Xil.
En Meis también hicieron un alto, para recibir las últimas cartas en una fiesta celebrada en el pabellón de deportes.
Tras su atareado paso por O Salnés quedaba aún por delante la noche de más nervios del año.
