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jueves | 25 abril | 2024
El pasado mes de mayo una pareja acaparó los medios de comunicación tras protagonizar una espectacular huida de la policía que los buscaba como autores de una decena de delitos cometidos en la provincia. A Miguel Ángel S.L. y a su mujer, Carmen C.R., se les apodó los Bonnie and Clyde de O Salnés pero tras cuatro días de escapada fueron arrestados y puestos a disposición judicial. Desde entonces permanecen en la prisión de A Lama porque la Audiencia de Pontevedra rechazó el recurso de apelación presentado por el abogado del hombre.
El jurista Jorge Paladino recordó ayer que ambos padecen una “grave adicción” a la heroína y por ello solicitó la puesta en libertad y el posterior sometimiento de este vallisoletano, de 42 años de edad, a unas medidas de rehabilitación, a su parecer, más apropiadas ante su situación. Sin embargo, la justicia ha considerado que “no tiene arraigo familiar suficiente en Galicia, los servicios sociales ya le quitaron a sus hijos y los indicios criminales son muchos, entre otras cuestiones” para no acceder.
Tanto él como su pareja, alicantina de 34 años de edad, permanecen en un módulo libre de drogas y, según Paladino, están intentando librarse de su adicción pero “no es fácil, es una lucha perpetua”, añade el jurista quien ha mantenido contacto con su defendido en varias ocasiones. Precisamente por este motivo, porque considera que su estancia en la cárcel no es adecuada para su reinserción y porque cree que los hechos que se le imputan son producto de la “desesperación” por reunir dinero para consumir, lo que merma su voluntad, dentro de un mes volverá a pedir su puesta en libertad.
En esta misma línea explicó que por el momento no hay fecha para el juicio pues únicamente hay diligencias policiales, es decir, el fruto de la investigación llevada a cabo por la Guardia Civil que los detuvo a principios de mayo en la localidad de Silleda tras haber robado un coche en Pontevedra y varios días de huida.
En los últimos tiempos estuvieron viviendo en Cambados y las autoridades los calificaron como una pareja “peligrosa” que actuaba con violencia e intimidación. Las mismas fuentes indicaban en aquel entonces que la principal hipótesis barajada por los agentes era que la mujer se ofrecía como empleada de hogar y luego robaban en las viviendas e incluso documentación con la intención de “falsearla”, siempre según las mismas.
El Instituto Armado les atribuye más de una decena de hechos delictivos cometidos en la provincia a donde habría llegado en abril, procedentes de Alicante, donde, al parecer, ya contaban con antecedentes. De hecho, la investigación no descartaba su implicación con la desaparición de un ciudadano extranjero en aquella provincia.
