CAMBADOS-La importancia de llevar el apellido Pardo de Figueroa

CAMBADOS-La importancia de llevar el apellido Pardo de Figueroa
Durán introduce a los presentes en la historia de los documentales emilio moldes

El Pazo de Fefiñáns es siempre un marco incomparable para cualquier propósito o evento, pero relatar la historia de sus moradores entre las mismas paredes que ocuparon siglos atrás, supera con creces cualquier otra actividad. Ayer una parte de la historia de los marqueses de Figueroa revivió con la proyección audiovisual de la Trilogía Trágica (1807- 1814) del historiador José Antonio Durán. Un excelente trabajo narrado a cuatro voces donde se pone de manifiesto la importancia de Benito Pardo de Figueroa y su sobrino Baltasar en la lucha contra la invasión francesa antes y durante la Guerra de la Independencia Española, o Guerra Peninsular, como prefiere el experto.
Sucedió en presencia de sus propios descendientes, con quien ostenta actualmente el título de marqués de Figueroa, Juan Gil de Araújo, en primera fila, e incluso bajo la atenta mirada de uno de los protagonistas, Baltasar, cuyo retrato al óleo preside una de las paredes de la sala donde se ofreció esta premiere. Y es que Durán estrenó dos de los documentales de esta trilogía y, cabe recordar, que ya en 2010, ofreció en el mismo lugar la primera pieza, dedicada a Benito Pardo, “Tragedias bélicas”.
La velada arrancó con el documental sobre su sobrino, “Romance del conde de Maceda”, y continuó con “Pedro Caro Sureda. La huella del marqués de La Romana”, procedente del Mediterráneo pero muy ligado a la historia de Galicia y Portugal. La obra completa se pudo ver en sesión de tarde en una función abierta al público en el auditorio; y Durán anunció ayer que la Biblioteca Nacional se ha interesado por los derechos.

drama y romance
El historiador destacó el entusiasmo de Baltasar por las reformas militares, inculcadas por su tío, así como su carácter valiente. “Prefirió arrojarse a la muerte antes de ver la derrota de los suyos”, se indica en el documental. Y es que falleció rodeado por las tropas francesas en la batalla de Medina de Rioseco, en 1808, con 35 años de edad. Su figura fue decisiva hasta el punto de que Durán le otorga la sublevación del norte de Portugal contra la ocupación. En el documental también se refleja el “calvario” de su “pareja de hecho”, Vicenta Waden, en un litigio por los derechos del hijo de ambos, nacido fuera del matrimonio.
El historiador desveló durante la presentación otros interesantes aspectos, como el importante papel de los señoríos, que eran quienes mandaban en las milicias, como parte de su tesis de que fue un levantamiento liberado por militares y no clases populares. De hecho, explicó que había un ejército regular y uno de reserva, de milicias. Un servicio que obligaba a los hombres a acudir cada tres meses a Pontevedra y durante ocho años para practicar ejercicios militares. Es más, explicó que pazos como el de Fefiñáns, eran un arsenal, instalaciones militares.  

por Joaquín lens
La velada también sirvió para recordar a Joaquín Lens, uno de los narradores de dos de las piezas y profesor (fue director de un instituto cambadés). “Era mucho más que una voz”, dijo Durán de él, recordando que narró por última vez días antes de fallecer. 

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