11º-26º
viernes | 19 abril | 2024
La DO Rías Baixas desarrolló ayer el seminario “El mercado de Vinos en Irlanda”, al que asistieron 18 bodegas, así como el presidente de su Consejo Regulador, Juan Gil de Araújo, quien señaló que para la denominación, este estado “se presenta como un mercado estratégico”. De hecho, actualmente ocupa la octava posición en las exportaciones. Durante el seminario, los representantes de las firmas tuvieron ocasión de catar los dos vinos blancos más vendidos en la restauración y en los supermercados de Irlanda, para conocer a sus competidores.
una denominación única
Izaskun Zurbitu, analista de mercado de la Oficina Económica y Comercial en Dublín, invitó a las bodegas asistentes a explotar “el concepto de vino celta, que vincula a Irlanda con Galicia, porque además de tener mucha relevancia para los irlandeses, Rías Baixas es la única denominación de origen que puede presumir de tener un vino celta”. Teniendo en cuenta que es un país muy pequeño, de unos 5 millones de habitantes, Zurbitu destacó que “junto con Puerto Rico y Noruega, Irlanda se sitúa en cabeza en el consumo de vinos de Rías Baixas per cápita, con una media de 2 litros por 100 habitantes al año.”.
Los Rías Baixas han experimentado un crecimiento de un 85% en los últimos cinco años en Irlanda y la sumiller irlandesa Lisa O’Doherty aventuró que “muchos prescriptores están convencidos de las posibilidades de que los vinos de Rías Baixas puedan convertirse en la nueva uva blanca de la que hablar los próximos años”.
Esta profesional del complejo de cinco estrellas K Club, puso a disposición de las bodegas sus más de 10 años de experiencia y recordó que Irlanda es un país no productor de vino y con una cultura muy reciente de vino, así que está muy abierto al gran mercado mundial.
Desde el Consello indicaron que aunque la trayectoria muestra que en este país los vinos de alta graduación eran sinónimo de calidad, la tendencia está cambiando. La experiencia demuestra que las bodegas que tienen un producto de buena relación calidad-precio y diferenciado con una etiqueta atractiva, finalmente acaban posicionándose en este mercado. “Es bueno que se hagan recomendaciones de maridaje de los vinos con la gastronomía, pues existe un conocimiento limitado del vino, aunque hay mucho interés por él”, admitió O’Doherty, quien recordó a las bodegas que estas características hacen que “el tapón de rosca sea muy aceptado en su país”. Sin olvidar debilidades, como que tiene uno de los sistemas impositivos más altos de Europa. “Una botella implica casi 5 euros de impuesto, lo cual favorece a los vinos de alta gama frente a los de baja”, explicó Zurbitu.
