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jueves | 25 abril | 2024
El río Umia ha sufrido en la zona de O Piorno –en el límite entre Cambados y Ribadumia–el enésimo vertido de escabeche en lo que va de año. Todas las advertencias de la administración no han surtido efecto y hay empresas que siguen infringiendo la ley, echando aguas sin depurar a la red de saneamiento comarcal. De hecho, la Mancomunidade do Salnés anunció ayer que se va a incrementar la inspección y se tomarán “medidas tremendamente contundentes” contra las infractoras.
Los restos de color naranja se descubrieron ayer y salieron al exterior a través de una tubería del bombeo de aguas residuales instalado en esta zona y a consecuencia de un alivio del sistema que se produce cuando el caudal a procesar supera su capacidad. Se trata de un procedimiento normal, para que no reviente las tuberías, como explicó el gerente comarcal, José Ramón García Guinarte. Sin embargo, lo que no es normal, además de ilegal, es que entre esas aguas aparezcan restos de escabeche.
Las autoridades y servicios de emergencias desplazados al lugar creen que el vertido se produjo hace pocos días, coincidiendo con las jornadas de lluvia, pero el escabeche afloró ayer al flotar sus componentes de aceite. De hecho, el aliviadero no echaba agua. Hasta allí se desplazaron técnicos de Espina y Delfín, concesionaria del saneamiento, así como efectivos de Emerxencias de Cambados y autoridades como el concejal de Medio Ambiente de Ribadumia, José Ramón González.
recuerdo de 2015
El episodio recordó a la situación vivida a finales de 2015, cuando los vertidos eran continuos en O Piorno y llevaron a las autoridades a anunciar medidas correctoras para reducir los alivios. De hecho, se sellaron las tuberías para evitar filtraciones de agua de lluvia y Aguas de Galicia ejecutará este año un proyecto de nueva conexión a la EDAR comarcal con el mismo objetivo. También anunció la Mancomunidade duras medidas contra las empresas infractoras porque con estos desagües se pone de manifiesto un problema mayor, que hay firmas “ás que lle funciona máis contaminar que poñer aparatos de decantación e depuración”, como señaló el primer teniente de Cambados, Víctor Caamaño, quien también estuvo haciendo seguimiento del asunto.
A la depuradora comarcal incluso han llegado incluso piezas enteras de pescado, que pueden causar graves averías. Detectar el origen es complicado, como reconocía ayer Guinarte, sin embargo, anunció que se incrementará la vigilancia y, a la sociedad que se le detecte un funcionamiento irregular, “lle vai saír moi caro” porque “se tomarán medidas tremendamente contundentes”.
un nuevo reglamento
La entidad supramunicipal también prepara un nuevo reglamento en el que asumirá las competencias de los concellos miembros en materia de vertidos para aplicar sanciones económicas más severas, pero además, a las que infrinjan reiteradamente puede llegar a denegarle el enganche en la red de saneamiento, con lo cual la empresa estaría abocada al cierre.
Según el gerente ya hay un borrador y están pendiente de definir el procedimiento administrativo para aplicar estas medidas, aunque la previsión es aprobarlo este año.
Los concellos de Ribadumia y Cambados están deseando que se actúe porque “non temos as ferramentas precisas”, explicaba el edil ribadumiense.
También estuvieron en lugar miembros del Club Náutico O Muíño, que mostraron su malestar por estos continuos episodios, que suceden en las inmediaciones de su sede.
