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viernes | 19 abril | 2024
Este verano no se podrá disfrutar de la Festa do Albariño de la manera acostumbrada. La necesidad de mantener determinadas medidas sanitarias por el coronavirus y la imposibilidad de controlar la masiva afluencia habitual en la celebración han provocado la cancelación de la degustación popular en las casetas y todo el programa de grandes conciertos y ocio, como el concierto estrella de Nicky Jam, que se ha pospuesto para el año próximo. Sin embargo, aunque el disfrute de los albariños en el Paseo da Calzada es parte fundamental del evento, el Consello Regulador de la DO Rías Baixas y el Concello no renuncian a su esencia y la cata concurso para elegir el mejor de 2019 se celebrará igualmente. Cabe recordar que el germen de la fiesta fue precisamente una pugna entre Ernesto Zárate y Bernardo Quintanilla por saber quién cultivaba el mejor albariño; premio que al final se llevó José Rodiño con su Carballás hace ya 68 años.
Así las cosas, la organización ha decidido mantener por lo menos el certamen teniendo en cuenta que es posible cumplir con las medidas sanitarias. Con todo, deberán realizar los preparativos necesarios en el Parador para que los miembros del panel de cata guarden las distancias de seguridad y se apliquen las instrucciones de limpieza a higiene necesarias. De hecho, los técnicos del Consello Regulador ya están trabajando en los detalles de esta cita y también en los del Túnel del Vino.
Detalles
Fuentes de la denominación explicaron que por ahora no se han cerrado, pero avanzaron que tendrá aforo limitado y se aplicarán todas las obligaciones sanitarias dispuestas por las autoridades. Tendrá lugar en el salón de Peña y el Consello espera anunciar en unos días cómo será la asistencia, es decir, si es preciso preinscribirse o puede hacerse como hasta ahora, que bastaba con acercarse a las instalaciones de San Tomé y pagar la correspondiente entrada. También se está estudiando si mantener los tres días habituales de celebración o recortar los horarios.
Cabe recordar que la DO apuesta desde hace años por esta iniciativa que ofrece una cata y degustación más pausada y tranquila en comparación con el ambiente más popular de A Calzada. Por el módico precio de 15 euros, los asistentes pueden probar más de 100 referencias de Rías Baixas de diferentes añadas y elaboraciones y contar con la ayuda profesional de sumilleres.
En cuanto a la entrega de las medallas de oro, plata y bronce, también se mantendría, pero con un acto más íntimo que tendría lugar el primer domingo de agosto en sustitución del gran Xantar al que acuden bodegueros, autoridades y agentes sociales y que ya se da por descartado porque suele reunir a unas 200 personas.
La previsión es realizarla en el salón de Peña, pero al igual que en el caso del Túnel del Vino, el Consello deberá solicitar permiso a Portos de Galicia. Cabe recordar que la instalación está en proceso de renovación de la concesión para su uso por parte del Concello y el ente público ha censurado que se haya venido utilizando para otras actividades diferentes a las directamente relacionadas con el sector del mar y la pesca. l
