Colectivos ornitológicos dan un ultimátum la Xunta por O Areoso

Dos entidades ornitológicas, Sociedade Galega de Ortitoloxía (SGO) y SEO Birdlife Pontevedra, denunciaron ayer públicamente lo que consideran una dejadez de la Dirección de Patrimonio Natural de la Xunta con la conservación de los espacios de O Areoso y Pedregoso, en A Illa de Arousa. Ambos colectivos se unen a las críticas que también hace el Concello, que desde hace años demanda una mayor protección para los islotes. Y dan un ultimátum: “Antes de explorar vías de denuncia á Xunta de Galicia ante a Unión Europea por incumprimento das directivas de Hábitat (92/43/CEE) e de Aves (2009/147/CE)”, reiteran al gobierno gallego la necesidad de un “ordenamento específico” para proteger los islotes, mayor vigilancia y la introducción de zonas de reserva, entre otras acciones.

Ambos emplazamientos, recuerdan, están incluidos en la Rede Natura 2000 de la UE, como Zona de Especial Conservación (ZEC) “Complejo Ons-O Grove” y Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA) “Complejo Intermareal Umia-O Grove”.

Con todo, afirman que la citada Dirección Xeral es “incapaz de compatibilizar un uso turístico sustentable, que por forza debe ser de baixa intensidade, coa conservación dos seus valores naturais, e por ende da súa relevancia en xacementos arqueolóxicos megalíticos” en estos espacios de A Illa.

Recuerdan no solo la “importancia dos seus recursos mariños”, que tradicionalmente explota la Cofradía, sino las colonias de aves, de “relevancia semellante ás existentes nas illas do veciño Parque Nacional das Illas Atlánticas”. Constan, entre otras, especies incluidas en el Catálogo Gallego de Especies Amenazadas, como la “Haematopus ostralegus”, cuya presencia en estos islotes supone el 20 % de la población de la especie en Galicia y un 5 % en la Península Ibérica.

El paisaje también supone “hábitats de interese comunitario” como dunas y vegetación de acantilado.

Presión turística

No obstante, ya en los primeros fines de semana de este verano se constataron, “se cabe con maior virulencia”, “eivas de xestión que se acumulan desde pasados anos”, con “masificación” turística y “comportamentos inapropiados”. Incluso el desembarco de gente con un perro, que se dirigió a una colonia de aves y dio muerte a varios pollos y algún pájaro adulto. Tampoco se respeta el vallado dunar y hay quienes se suben sobre los dólmenes.

Desde el Concello, por su parte, la concejala de Medio Ambiente, Gabriele von Hundelshausen, consideró que “estamos convencidos de que outro turismo, sostible, é posible e outra xestión dos espazos naturais protexidos”, pero se muestran “indignados” con la situación y recuerdan que “levamos anos reivindicando máis protección”. l