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jueves | 25 abril | 2024
Los servicios esenciales que siguen operativos en pleno confinamiento incluyen también los de cuidado de mayores y dependientes a domicilio. Es el caso del programa Ayuda en el Hogar, que solo en Vilanova atiende unos sesenta casos y que, pese al temor al contagio y las restricciones de movilidad, continúa a pleno rendimiento, con el mismo empeño de las asistentas sociales y el cariño de a quienes ayudan. Igual que siempre, pero de forma diferente.
Diferente, porque el escenario es otro. Y obliga a extremar las medidas higiénico-sanitarias más allá de los protocolos ya habituales. Pero ni aún a la sombra del virus decae una prestación tan esencial.
Desde el Concello de Vilanova confirmaban ayer que tan solo hubo cuatro o cinco casos en que los beneficiarios del programa han comunicado la decisión de no disfrutar del servicio en tanto dure esta situación excepcional de cuarentena. “Pouca xente o suspendeu”, valoran, destacando el clima de total confianza y la persistencia de las situaciones de necesidad y dependencia que atienden.
Confianza
Peregrina es una vecina de Vilanova de 90 años que recibe asistencia a través de este servicio. Dependiente y con su hija Jesusa también limitada para levantarla, acostarla y atenderla al cien por cien, reciben la ayuda prestacional.
Carmela, una asistenta en este servicio social, la levanta, viste, acuesta y si es necesario asea, además de realizar labores de limpieza en su habitación. La confianza es tal, que incluso se le dejan las llaves de casa si Jesusa debe salir al médico.
“Estamos moi tranquilas”, valoraba ayer esta última. No solo por el servicio, sino por la situación sanitaria, que reciben con todas las precauciones: Además de los protocolos de Ayuda en el Hogar, que incluyen mascarillas, guantes y medidas de desinfección, en casa hay siempre lejía y agua en los accesos para que cada entrada sea segura.
La dependencia, un mundo que ya libraba heroicidades diarias antes del estado de alarma.
