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jueves | 25 abril | 2024
El cuatripartito celebrará la semana próxima una reunión que puede ser decisiva e inclinar la balanza de la crisis política hacia la ruptura o la continuidad. Por el momento, la segunda opción parece la más plausible pues parece que las relación entre los cuatro socios están volviendo a su cauce e incluso se contaría con la presencia de Cambados Pode, quien abandonó la “renegociación” de algunos términos del pacto y fue quien tiró la “primera piedra” de esta crisis. Con todo, la tónica sigue siendo la misma, es decir, los partidos guardan silencio.
El formato de este encuentro también sería diferente. No se tratará de una reunión de la comisión de seguimiento del pacto de gobierno. El portavoz de Pode, José Ramón Abal Varela, ya no acudió a la segunda y última celebrada –en la que sus socios acordaron pedirle que retomara el diálogo– porque le parecen “estériles”. Pero tampoco será una Xunta de Goberno local al uso pues está prevista la asistencia de todos los concejales del gobierno local, y sin otros intermediarios externos de los partidos. Con todo, los planes pueden cambiar en el último momento pues sigue instalada cierta tensión. De hecho, el BNG tampoco acudió al primer encuentro convocado por la alcaldesa, Fátima Abal..
Reunión con la regidora
Tampoco está confirmada al cien por cien la asistencia de Pode, pero Abal Varela ya asistió esta semana a la Xunta de Goberno y mantuvo una reunión con la regidora, que le puso al día de la situación tras sus ausencias. Así las cosas parece haber un acercamiento y la crisis podría haberse solventado antes del día 28; fecha clave. Es cuando se celebrará el pleno solicitado por el PP para pedir la retirada de las atribuciones económicas y de mando al concejal de Economía, Xurxo Charlín; el origen de todos los males del cuatripartito, según Abal Varela. Cabe recordar que la crisis estalló cuando este edil le acusó de “usurpar” sus funciones y luego extendió su “desconfianza” al resto de socios. Y es que ya en la sesión anterior su voto propició que prosperara una moción del PP y no saliesen adelante otras de BNG y PSOE.
Pero Pode también guarda silencio respecto a lo que hará ese día y, aunque diera su apoyo a los populares, el partido conservador no parece dispuesto a una moción de censura con este partido.
Exigencias
Del mismo modo, a pesar del acercamiento tampoco queda claro cómo se podría cumplir la exigencia del partido de Vilariño que era la retirada de la portavocía municipal a Xurxo Charlín. Y es que lo dejó en manos de la alcaldesa, pero la socialista siempre se ha remitido a la “lealdade” que debe a todos los partidos que en 2015 le dieron el bastón de Alcaldía .
