La Diputación señala la “imposibilidad” de alcanzar acuerdos con la Xunta como “única lagoa” del mandato

La Diputación señala la “imposibilidad” de alcanzar acuerdos con la Xunta como “única lagoa” del mandato
Diario de Arousa-2018-12-28-011-f19bba77

El vicepresidente de la Diputación de Pontevedra, César Mosquera, destacó ayer que la coalición entre BNG y PSOE fue “mellor do previsible inicialmente” y, de hecho, cree que si ahora se celebraran elecciones “non lles tería medo, non teriamos problema en revalidar o goberno”. Para el diputado, la “única lagoa” de este mandato provincial ha sido la “imposibilidade de chegar a acordos coa Xunta”. 

El nacionalista considera que la postura del presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo “é un erro” porque “impide o bo funcionamento das administracións e os servizos en beneficio da cidadanía” y defendió que, por parte de la Diputación, “non houbo intención de montar ningunha guerra institucional”.

En concreto, se refería así a la transferencia de competencias sobre cuestiones como el puente de Catoira, que sigue siendo de la entidad a pesar de unir dos provincias y carreteras autonómicas, aunque lamentó que “en xeral, a actitude da Xunta é bastante succionadora, quere centralizar todo e exportar o que lle convén”, lamentó.  

Mosquera realizó esta valoración en un desayuno informativo con medios de comunicación en el que hizo balance de los tres años y medio dentro del ejecutivo provincial en los que “a equidade e o cumprimento do programa foron os eixos reitores de todas as decisións tomadas”.   

En esta línea, Mosquera indicó que, en estos momentos, a falta de cinco meses para las elecciones municipales, lo que queda por hacer desde la administración provincial está ya planificado y gestionado en todos los departamentos.

En cuanto a la Diputación como institución, el vicepresidente reflexionó sobre que este tiempo no le ha hecho cambiar su postura sobre estas instituciones sino que “reforzou” su visión de que “as deputacións deben reformularse como tal”, ya que considera “un fraude de lei que a cidadanía non poida elexir directamente aos dirixentes provinciais”. Es más, se mostró “convencido” de que si hubiera comicios directos, “os nosos resultados serían moi bos, non lle tería medo porque non teriamos problema en revalidar o goberno”. De hecho, afeó el “escaso nivel político” de la oposición del Partido Popular porque “non len nin os papeis”.  

Todo ello gracias al “bo traballo” que, aseguró, se ha realizado en estos años. Como áreas destacables mencionó el Plan Revitaliza, que gestiona él mismo desde Vicepresidencia, y que cuenta con 42 concellos adheridos, “unha cifra moito máis elevada da agardada” y que “duplica en número de municipios ao plan liderado por Rafael Louzán –el expresidente provincial–”. 

Reconocimiento fuera
Asimismo se refirió a Mobilidade, con la definición de unos criterios básicos  de actuaciones sostenibles y amables que han convertido la institución en una “referencia en tempo récord”. Es más, recordó que esta política ha sido expuesta en Suecia, Lima, congresos de la DGT y “recoñecida en numerosos puntos” del Estado. 

Mosquera también argumentó que el relevo del director del Museo de Pontevedra, Carlos Valle, sigue el criterio existente de jubilar a los trabajadores a los 65 años y que ýa se ha hizo con la Estación de Areeiro. “Sabemos que non gustou especialmente, pero así se fixo con xente de moita valía que non se renovou”. Además avanzó que la nueva dirección se elegirá por concurso de méritos y no será “eterna”, renovándose cada cinco años para “modernizar” el museo. 

En cuanto al parque de maquinaria, afirmó que hay “vontade política” de trasladarlo, pero hasta entonces, y para evitar que esté en situación irregular, se pidió a Costas una prórroga de tres años de ocupación del terreno. Respecto a la imprenta, reconoció que la situación “é máis conflitiva” al ser de las pocas diputaciones con una propia y “é difícil mantela a futuro sen tela autorizada” y la necesaria renovación de las máquinas “co custe que sito supón”.

La Diputación señala la “imposibilidad” de alcanzar acuerdos con la Xunta como “única lagoa” del mandato

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