El embajador inglés certifica que Rías Baixas no necesita renunciar a su nombre para reinar en el mundo

La orden albariñense ingresó ayer en nómina a cinco nuevos Cabaleiros y una Dona para “defender o albariño como señor de todos os viños do mundo cristián”, tal y como reza el juramento que esta orden salvaguarda desde hace ya medio siglo. Una vez más, el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, actuó de Gran Mestre oficiando el acto y encomendando a cada uno una misión específica según su perfil. 

En nombre de todos ellos habló el embajador de Reino Unido en España, Simon Manley. Dejará el cargo en breve y “sentiré mucha morriña por España, es un país maravilloso”. No obstante, se tomó tan en serio su compromiso con el albariño que añadió: “Gracias al Capítulo mi papel como embajador no ha terminado porque seré embajador del Albariño”. 

Entusiasmo
El entusiasta diplomático fue uno de los más vitoreados en el acto por expresarse, en parte, en un gallego con poco que reprochar y por beberse de un solo trago la copa de vino de obligado consumo tras aceptar el juramento, que él aceptó con un claro “si, xuro” y sin resistírsele la “x”. Tampoco cuando en su discurso se refirió a la calidad de los vinos de la DO Rías Baixas; desmontando, por lo menos en su caso, las recomendaciones de los expertos en marketing que tanto ha tenido que escuchar su Consello Regulador: Una de las dificultades con las que se encuentra el consumidor americano es con la pronunciación de esa letra. Sin embargo, nunca ha parecido impedimento pues tanto en uno como en otro país, las ventas crecen.

El resto de nuevos Cabaleiros también siguieron el ejemplo del presidente de Martín Códax, Xoán Allegue, que tampoco dejó una gota en el vaso. La única que dejó algo fue la Dona, la catedrática y prominente investigadora farmacéutica María José Alonso, que fue la primera y tuvo que romper el hielo del solemne acto. 

Este se desarrolló en el Patio de Armas de Fefiñáns, como manda la tradición, y con la presencia de autoridades y cofradías amigas del Capítulo Serenísimo. Allí también se entregaron el resto de reconocimiento de la orden albariñense, a personalidades y agentes del sector por su labor de divulgación y promoción del sector de la denominación de origen. 

Otros galardones
Así, fueron nombrados Xóvenes Albariñenses: Andrea Obenza (Condes de Albarei), David Otero (Pazo Señoráns) y Natalia Rodríguez (Señorío de Rubiós). En cuanto a los Albariñenses de Honra, este año se concedieron a una delegación comercial de Uruguay, encabezada por Rodolfo Rodríguez; a la Conferencia Española de Consejos Reguladores Vitivinícolas (Cecrv), presidida por el presidente de la DO de Navarra, David Palacios; y al Grupo Manso e Amigos, capitaneado por el famoso acordeonista Salvador Cores. De hecho, acudieron todos sus miembros y cada uno recibió su diploma. Un socio de Condes de Albarei presente en el acto dijo de ellos: “Sempre fan unhas festas... Oro de lei”. Y es que es conocido su amor por el pueblo cambadés y sus altruistas conciertos. 

Las Follas de Prata fueron para José Balseiro, director general de Medio Rural; el enólogo Pablo Estévez; Sandra García (Paco & Lola); el exalcalde de Salvaterra y uno de los fundadores de la Cofradía de los Vinos del Condado, Arturo Brandal; el maestro gaiteiro Óscar Ibáñez; Isabel Salgado (Adega Fillaboa) y a la familia Villar, propietaria de la joyería más antigua de Galicia y que crea desde hace décadas todos los galardones de la fiesta desde su taller ubicado en la Praza Ramón Cabanillas de Cambados.