La falta de interventor retrasa la aprobación del acuerdo del Albariño

La falta de interventor retrasa la aprobación del acuerdo del Albariño
Asistentes a una edición anterior de la Festa do Albariño | gonzalo salgado

El acuerdo para la organización de la Festa do Albariño entre el Concello y el Consello Regulador de la Denominación de Orixe Rías Baixas seguramente no se podrá aprobar hasta finales de mes. Será en una Xunta de Goberno, pero precisa de un informe de Intervención y el nuevo funcionario no tomará posesión hasta finales de mayo, según los cálculos de la alcaldesa, Fátima Abal. La regidora señaló además que la moción presentada por Cambados Pode para establecer unos horarios de cierre para las casetas de manera unilateral no se debatirá en el pleno previsto para este jueves porque será de carácter extraordinario y únicamente llevará los presupuestos de 2018, que superan los 9 millones de euros.

La moción de Pode
Esta iniciativa y otras presentadas por el resto de miembros del cuatripartito, así como las mociones pendientes de la sesión de marzo, que quedaron fuera por falta de tiempo, se debatirán en un pleno ordinario, todavía sin fecha. Y es que, cabe recordar, que los cambios de secretario han retrasado cuestiones como estas. Lo mismo viene sucediendo con el interventor. De hecho, el nuevo no tomará posesión hasta finales de mes y, según la regidora, es necesario un informe suyo para aprobar el preacuerdo sobre la organización de la Festa do Albariño. Abal explicó que en esas bases alcanzadas con el Consello Regulador también se habla de las invitaciones que el Concello hace a las bodegas para el Xantar de la fiesta y que esta cuestión tiene que ser informada por este técnico municipal.

El asunto se aprobará en una Xunta de Goberno pues tanto la regidora como sus socios de BNG y Somos considera que es una decisión de gobierno y no del Pleno de la Corporación. No lo ve así Pode, quien lleva semanas reclamando la convocatoria de un pleno para que sea el Concello quien establezca los horarios de cierre de las casetas y zanjar la polémica surgida porque la propuesta de Rías Baixas se considera tempranera. De todos modos, en ese preacuerdo ya no se contemplaría el controvertido horario de las 00:30 horas sino que se garantizaría la libertad de cada bodega a cerrar cuando lo estime oportuno, siempre que cumpla el horario máximo legal permitido. Esto es, no más allá de las 4:30 horas, aunque desde Pode aseguran que la normativa permite estirarlo hasta las cinco, en algún caso.

Otra de las cuestiones que están estudiando Concello y Rías Baixas es extender la zona de casetas de A Calzada hasta la carretera, cortando ambos carriles de circulación. Una parte de la casetas se pondría de espaldas a la mediana de hormigón y el resto dentro del paseo, como hasta ahora. En cuanto a las “food trucks” se colocarían pegadas a la zona ajardinada del paseo marítimo. Sin embargo, para poder sacar adelante esta idea hace falta un informe favorable de los técnicos de la Diputación, que todavía no ha llegado.

La falta de interventor retrasa la aprobación del acuerdo del Albariño

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