Los ladrones revuelven una casa de As Rubas y roban dinero, cuatro televisores y un ordenador

Como cada viernes, el pasado día 8, Lourdes Rivas, su marido y sus dos hijos, de 14 y 8 años de edad, salieron de casa para ir a cenar a un establecimiento de la localidad. En el tiempo que estuvieron fuera, a penas dos horas, los ladrones entraron en su casa de As Rubas y se llevaron dinero en metálico, cuatro televisiones, un ordenador portátil y una máquina de lavado a presión que tenían en la huerta, así como el bolso de la mujer, con documentación identificativa y sanitaria de la familia.

“Cando chegamos a casa, fumos entrar por la porta de atrás, que vai á cociña, e xa a vimos aberta e co marco de aluminio forzado, seguramente, cunha pata de cabra. O salón estaba revolto e a miña habitación e a do meu fillo tamén”, explicaba ayer Rivas.

Los vecinos no escucharon nada y a esta familia no le extrañaría nada que los ladrones emplearan una lancha para llevarse todo, porque su casa es la última del barrio, está próxima a la costa y la calle no tiene salida para vehículos, muriendo en una senda peatonal. Tampoco les causaría sorpresa que previamente vigilaran sus movimientos, pues accedieron justo entre las 21 y las 23 horas de un viernes, momento en que casi siempre están fuera de casa. Además, conocían la existencia del acceso trasero a la vivienda.

una bolsa: única pista

Esa misma noche, Rivas y su esposo llamaron a la Guardia Civil que acudió al lugar en busca de pruebas. Incluso revisó el camino que conduce hasta la costa y las fincas colindantes, por si los autores hubieran escondido algún objeto. Pero el único resultado fue el hallazgo de una bolsa de deporte que “estaba sobre a cama de matrimonio pero non era nosa”. Asimismo interpusieron la correspondiente denuncia en el cuartel de Vilagarcía pero sin mucha esperanza en recuperar sus pertenencias. “O que levaron xa non o recupero, nin as televisións, nin o ordenador, nin os cartos que sacara pola mañá do bancos. Ademais, penso que viñan buscando algo así, porque non romperon nada. Pero teño a esperanza de que deixaran o meu bolso tirado por aí, porque tiña os carnés de todos, as tarxetas sanitarias... E agora hai que renovalo todo”, apuntó la isleña. Ayer esperaba la visita del perito del seguro para detallarle la lista de efectos sustraídos.

Este no ha sido el único robo ocurrido en la villa en lo últimos días. Hace unas semanas, otro vecino denunció la sustracción del motor de su planeadora.