Mar pide “tranquilidade” al sector ante el proyecto minero de Touro

La conselleira de Mar, Rosa Quintana, pidió ayer “tranquilidade” al sector ante el proyecto de la mina de Touro a la espera de conocer el resultado de los informes técnicos solicitados. La iniciativa empresarial ha encontrado una importante oposición social en Arousa ante los posibles perjuicios que causará en la Ría. De hecho, el día anterior, el jueves, todos los partidos políticos de Cambados daban su apoyo a la moción de la plataforma solicitando a la Xunta que lo rechace y tras la intervención del patrón mayor cambadés, Ruperto Costa, en la que señaló que “vai aumentar o drenaxe de contaminantes si ou si” y mostraba la desconfianza del sector a las “boas palabras” de medidas de seguridad y restauración posterior de la mina, una vez terminada la explotación, pues la anterior lleva 30 años abandonada. “Cobre e cartos para fóra e a merda e a contaminación quedan aquí para toda a vida”, resumió. 
Quintana explicó que la administración autonómica no puede rechazarlo hasta conocer el resultados de los informes sectoriales pedidos y que así se le trasladó al sector en una reunión a la que también asistió el conselleiro de Economía, como departamento competente en la concesión de los permisos. Es más, cree que transmitieron “tranquilidade” porque prometieron mantener todas las reuniones necesarias. 
La titular de Mar visitó Cambados para conocer en primer persona la nueva planta de eviscerado de vieira puesta en marcha por la Cofradía. “Un paso valente” y un “exemplo que espero sirva para outras confrarías”, manifestó. De hecho, considera que el sector “está evolucionando” buscando mejoras en la comercialización que “dean un valor engadido que repercuta nos produtores”. 

Vida más allá de Navidad 
Respecto a la ausencia de vieira cambadesa en los mercados navideños porque el tamaño se consideraba inapropiado, Quintana le restó importancia. Es más, considera que quizás sea positivo que los compradores se acostumbren a un “consumo desestacionalizado” pues en esas fechas están casi todas las especies en venta. 
El patrón mayor también lo cree así: los mercados están “respondendo moi ben” y además esta es una “época do ano non moi boa para outras capturas”, con lo cual supone un ingreso seguro para la flota. Además, este año se aumentó el precio para los marineros (a 5,50 euros por kilo). 
Ruperto Costa señaló que la campaña –iniciada el día 17– va bien y el lunes cambiarán la zona de faena IV por la I y la II. Hay poco recurso de tamaño comercial, pero, por ahora, se cubren los topes diarios de hasta tres toneladas y nadie se aventura a señalar cuánto durará.
Es el primer año que el Pósito eviscera la vieira tras habilitar la nave de moluscos de Tragove mediante una ayuda de los  GALP que, según la conselleira, está animando a otros entes a diversificar la actividad. Antes ya había fundado la sociedad Porto de Cambados para venderla sin intermediarios. Mar destinó más de 1,3 millones a esta nave que cuenta con equipos nuevos y unas 20 personas trabajando. l