O Mulo se enfrenta a 17 años de cárcel por la cocaína de la lancha quemada en A Lanzada

El cambadés Rafael Bugallo Piñeiro, O Mulo, se sentará en mayo en el banquillo de los acusados de la Audiencia de Pontevedra por su presunta vinculación con el alijo de más de dos toneladas relacionadas con la lancha varada en A Lanzada en agosto del año 2008. La Fiscalía solicita para él 17 años de prisión y una multa próxima a los 600 millones de euros.
Bugallo Piñeiro permanece actualmente en la cárcel a la espera de otro juicio. En este caso relacionado con la operación antidroga desarrollada en Reyes de 2015 y relacionada con la tonelada de cocaína del barco Coral I, interceptado en alta mar por las fuerzas de seguridad.
El cambadés ha sido detenido en otras ocasiones por presunta relación con transportes de droga y los investigadores lo consideran un destacado lanchero de las Rías Baixas.

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En la vista que tendrá lugar en mayo se sentará en el banquillo de los acusados por el intento de introducir unos 2.000 kilos de este estupefaciente en Galicia en una operación que se vio frustrada porque un avión de vigilancia la interceptó en aguas próximas a Portugal. Sus tripulantes se vieron acorralados y acabaron varando la planeadora en la playa de A Lanzada y le prendieron fuego. Se trataba de un embarcación de 19 metros de eslora y varios potentes motores fueraborda que responde a las características de las lanzaderas utilizadas por los narcotraficantes para llevar la droga hasta la costa.
Unas horas después del llamativo suceso –la columna de humo del incendio se contemplaba a kilómetros de distancia– la Policía halló fondeados más de 80 fardos en las inmediaciones del Cabo Silleiro, en Baiona, que los transportistas seguramente lanzaron al mar al haberse sorprendidos por las autoridades.
Los tripulantes lograron huir, pero unos días después la Udyco de la Policía Nacional detenía a O Mulo y a otras personas relacionándolas con el alijo, en concreto, con la logística para la recogida de la cocaína en alta mar y su introducción en la costa.
El cambadés también tiene pendiente otro juicio. En este caso por la operación que en las navidades de hace un año lo llevó a prisión. En este caso el Ministerio Público pide para él 24 años de cárcel y multas que superan los 400 millones de euros y que, sumadas al procedimiento por la lancha, hacen que el cambadés se enfrente a penas por valor de 40 años.