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jueves | 25 abril | 2024
Polémica a la vista. El Concello vilanovés y la nueva asociación turística del municipio “Presume de Vilanova” lamentaron ayer un cierre del albergue de peregrinos de A Armenteira (Meis) que este último ayuntamiento niega. Los vilanoveses acusaron a los meisinos de perjudicar la Variante Espiritual con este supuesto recorte en la atención y servicios a peregrinos, acusación que causó perplejidad en la regidora de Meis, Marta Giráldez, ya que afirmó que el albergue que gestiona su Ayuntamiento reabrirá, como todos estos establecimientos, a partir de julio.
“Non sei se leron o decreto”, valoraba ayer la alcaldesa socialista tras conocer las críticas que partieron desde Vilanova. Giráldez, recordaba con ello que los albergues de peregrinos en Galicia se vieron estos meses forzados a suspender su actividad por la normativa anti-coronavirus, a nivel autonómico. Lo que no quiere decir que el de A Armenteira haya cerrado, subrayó. Es más, el Pleno meisino aprobó una ordenanza reguladora de la tasa para la prestación del servicio en este establecimiento, cuya gestión pasa de manos de la Fundación Amigos do Camiño a las del Concello. Los trámites de esta ordenanza, con su exposición pública, puede que terminen dilatando unos días la reapertura, pero la alcaldesa afirma que, en cualquier caso, se reabrirá con todas las garantías en las primeras jornadas de julio, una vez lo autoricen las autoridades gallegas.
En busca de alternativas
Con todo, en Vilanova valoraron ayer la situación con temor, dando por hecho el cierre de A Armenteira. “No somos responsables de lo que haga Meis, pero nuestros vecinos no tienen por qué sufrir las malas decisiones que hagan otros ayuntamientos”, declaró el alcalde vilanovés, Gonzalo Durán.
Ramón Cardalda, presidente de “Presume de Vilanova” indicaba sobre el albergue meisino que “non sei por que se pechou”, añadiendo que han comenzado ya a negociar con establecimientos para reubicar en Poio y Ribadumia a los peregrinos que pueda perder la parada de Meis. Incluso confirmaron contactos con el Hostal Santa Baia de Ribadumia en este sentido.
Concello y asociación culpan así a Meis de lastrar la Variante del Camino Portugués. Mientras, ayer realizaban una visita a dos albergues de iniciativa privada en la localidad, donde precisaron, justamente, que la actividad se retomaría desde el 1 de julio.
Estos negocios presentaron además sus adaptaciones anti-Covid, con toma de temperatura a peregrinos, gel hidroalcohólico y uso obligatorio de mascarillas y guantes en las zonas comunes.
La polémica coleará. De hecho, Meis convoca hoy un acto para ahondar en este nuevo frente por los albergues de la Variante y “contestar as falsas declaracións feitas polo alcalde de Vilanova de Arousa”, adelantan. l
