Reportaje | La EEI de Aios crea su propio juego educativo: “La Oca Poli Paco”

La escuela unitaria de Aios está a punto de culminar un proyecto educativo diferente en el que han trabajado la seguridad vial, la educación medioambiental, la igualdad y el conocimiento de su entorno. Se trata de la “Oca del Poli Paco”, una propuesta educativa y lúdica que ha mantenido fascinados durante este primer trimestre a los nueve alumnos de entre 3 y 5 años con los que cuenta el centro. La idea surgió del policía local, Abelardo Martínez, durante uno de los periplos por el sur de España con el guiñol Poli Paco y lo propueso a la maestra de la escuela de Aios, Marta Muñiz, que no dudó en ponerla en marcha. “El que yo vi era un juego de la oca de seguridad vial, pero éste es mucho más completo porque toca distintos palos”, explica Martínez.
El juego simula a la tradicional  Oca pero con preguntas. Así, cuenta con fotos e imágenes tomadas de los niños en situaciones que previamente pudieron experimentar en distintos espacios y a partir de ahí se realizan las preguntas. Si aciertan avanzan y si logran llegar al final optan a conseguir el diploma de Cidadán Responsable. “Hicimos salidas casi todos los días y eso a los niños les encanta. Estuvimos en la playa del pueblo, buscamos contenedores y estuadiamos para qué servía cada uno, pero también cocinamos en casa de la abuela de una alumna y luego fregamos los cacharros... No paramos”, explica Marta Muñiz que agradece la colaboración del profe en prácticas, Carlos, que le ha acompañado durante estos tres primeros meses. “Una excursión hasta la playa nos lleva dos horas porque los más pequeños caminan más lentamente, pero les ha servido también para conocer su entorno”, señala Marta Muñiz.
El juego también propone distintas situaciones que los niños deben reconocer como un buen o un mal comportamiento. “Se trata de inculcarles valores desde la infancia y qué es lo correcto. Para la cuestión de diferencia de géneros todavía son muy pequeños, pero es bueno ya educarles en igualdad”, advierte Muñiz.
La idea es que el juego se pueda llevar a otros centros educativos del municipio de Sanxenxo e incluso ampliarlo con nuevas celdas y nuevas situaciones. “Se trata de llevar la clase a la calle ”, señala Abelardo Martínez.