Reportaje | Estilo cambadés y caras conocidas para despedir cinco días de vino y sentimiento

El Albariño despidió una nueva edición con los actos más solemnes. No faltó el tradicional desfile de cofradías amigas del Capítulo Serenísimo llegadas de diferentes lugares de España, que pareció haber revivido, en cuanto al número de espectadores se refiere. Volvieron las imágenes parecidas a ediciones previas al cambio de ubicación de la salida y en esto tuvo mucho que ver el actor José Coronado. No dejó de recibir “guapos” durante todo el recorrido. Se mostró atento incluso durante el Xantar y algunos dudaban que hubiera ingerido alimento alguno pues no puso reparo a ninguna petición de fotografía de los asistentes; hasta compartió confidencias con Feijóo ante un bonito mural de botellas y flores elaborado por la empresa cambadesa “Imagina lo inimaginable”, que se encargó de la decoración y el protocolo de la comida. Con todo, no fue el único destacado, también estuvieron los medallistas internacionales del Club Náutico O Muíño, María Pérez y Manuel Fontán. Este año además la mesa presidencial era más pequeña y solo estaban las principales autoridades, como la alcaldesa, Fátima Abal, que habló con mucho orgullo de la villa, tanto como el que mostró su madre registrando el momento en video. Mientras, se servían las últimas copas en A Calzada. La fiesta se acabó, pero el sentimiento sigue. l