SANXENXO-Afectados por la expropiación en O Revel quieren saber cuánto cobrarán

Los afectados por las expropiaciones para el colegio de O Revel comienzan a preocuparse. De los 31 propietarios que aparecen en la lista de expropiados, más de veinte se dieron cita el martes por la noche en la capilla de Gondar para poner en común su preocupación por la falta de información facilitada por el Concello en lo que a este proceso se refiere.
Y es que su principal inquietud es el precio al que el Concello pretende pagarles el metro cuadrado de suelo en O Revel. De eso nadie les ha dicho nada. Ayer mismo se dirigían al departamento municipal de Urbanismo para reunirse con María Deza. Según explican, les atendió con mucha corrección, pero tampoco ella les dio el dato que buscan confirmar: A cómo se pagará el metro cuadrado.
Por ello, urgen una reunión con la alcaldesa. De ella es de quien quieren arrancar un compromiso claro. El precio que les ofreció hace ya casi ocho años en una reunión en Vilalonga, en la que se habló de 48 euros el metro cuadrado.
Y es que esa cantidad, que ellos aceptaron entonces, dista mucho de los 6 euros por metro que sale de dividir la cantidad que el Concello reserva para expropiaciones y los metros cuadrados necesarios.
Sin embargo, este dato nadie se lo ha confirmado a los afectados. Todos ellos han recibido una notificación municipal en la que se les informa sobre el proceso expropiatorio y los plazos. Pero a ninguno de ellos le han hecho llegar la hoja de aprecio, en la que tendría que valorarse el terreno a expropiar. Tampoco ayer se la facilitó María Deza, edil de Urbanismo, en el encuentro que mantuvieron con ella.
Los afectados recuerdan que en ningún momento se opusieron a ser expropiados. Ni ahora ni en el momento inicial de este proceso, hace casi una década.
Aceptaron en todo momento la valoración de los terrenos. Y es que los 48 euros iniciales no convencieron a todos, pero sí a los que el martes se reunieron en la capilla de Gondar.
Si la expropiación, o compra, no se hizo en aquel entonces no fue por responsabilidad de los propietarios, sino que se demoró por causas ajenas a ellos.
De ahí que ahora no estén dispuestos a que se varíen las condiciones de aquel acuerdo.
Dejan claro que todos los que tienen terrenos afectados “queremos que se faga o colexio. É unha prioridade para nós e para todos os veciños de Vilalonga, e non imos poñer ningún impedimento para que a obra se faga”.
Pero con la misma claridad  con la que plantean esto, aseguran que “nós nunca pedimos que nos fixeran unha oferta nova. Aceptamos a que nos prantexou o Concello”. Y quien lo hizo fue Catalina González. Por ello, queiren hablar con ella y conseguir abrir una vía de negociación en la que se establezca esta cantidad como precio para la expropiación. “Incluso estaríamos dispostos a negociar algo porque sabemos que hoxe os terreos devaluaronse algo”. Pero lo que no aceptan es regalar sus terrenos a la administración.