VILANOVA - El Concello cierra en 2016 un ejercicio con remanente positivo por primera vez en años

El Concello de Vilanova cerró las cuentas de 2016, “por primera vez en muchos años con números negros y no rojos”, adelantaba ayer el alcalde, Gonzalo Durán. El regidor apuntó que la liquidación de la última anualidad arrojará un remanente positivo, más ingresos que gastos, aunque por el momento desde el gobierno local no refirieron el dato concreto, a falta de llevar a aprobación esta liquidación en Pleno.
El primer edil también expuso que, de forma análoga y por primera vez en años, se reduce el plazo de pago a proveedores, que sigue siendo uno de los más altos del entorno.
Durán se refirió ayer a la marcha de la interventora, María Jesús Piñeiro Bello, a la Xunta, tras su nombramiento político como directora xeral de Recursos Económicos del Servizo Galego de Saúde (Sergas). El regidor indicó que ahora se buscará un interventor interino mientras Piñeiro ocupe el cargo, ya que pedirá una excedencia que le permita regresar en el futuro al departamento de Intervención vilanovés, de cuya plaza es titular. Por ello, también dijo que seguirá consultándole temas económicos de la localidad con ella, en la medida de lo posible. En todo caso, aseguró que “el presupuesto lo dejó listo”, a falta de que el Gobierno central autorice el nuevo plan de ajuste de la deuda de Vilanova, visto bueno previo y necesario para sacar adelante las cuentas de 2017.  n