Vilanova estará vigilada con cámaras de seguridad por todo el municipio

Un total de veinticinco “ojos”, nueve en una primera fase, vigilarán día y noche los principales enclaves de las vías públicas de todo el término municipal de Vilanova. El alcalde, Gonzalo Durán, anunció ayer la instalación de cámaras de vigilancia, fundamentalmente para el seguimiento del estado del tráfico, pero que también podrán utilizarse como medio de investigación o de prueba para la resolución de delitos. 

El regidor presentó la medida junto al teniente de alcalde, Javier Tourís, y el jefe de la Policía Local, Joaquín García. Las autoridades municipales detallaron que las filmaciones de las videograbadoras no tendrán capacidad de sanción ni se utilizarán como “radar” para multas de tráfico. 

Sí tendrán utilidad para que los agentes sepan en tiempo real cómo están los principales cruces y arterias viarias de la localidad, algo de especial relevancia, por ejemplo, en la carretera de A Pantrigueira durante los eternos atascos de verano hacia las playas. En cumplimiento de la legalidad, el sistema de grabación estará automatizado y solo tendrán acceso a las imágenes los agentes del Orden. Se almacenarán durante treinta días, borrándose automáticamente agotado este plazo si ningún juez las reclama. Porque será la autoridad judicial, presentada la pertinente denuncia o demanda, la que podrá ordenar recabar las grabaciones en busca de delincuentes o infractores. 

Seguridad y proyecto
Durán aseguró que Vilanova “es un pueblo seguro”, pero dados “algunos delitos como los que, desgraciadamente estamos viendo en los últimos tiempos”, contar con medios “del siglo XXI” será clave para ayudar a la resolución de casos y como medida disuasoria. El primer edil recordó cómo en la desaparición de Diana Quer llegaron a revisarse las cámaras de seguridad de la Autovía de O Barbanza. 

Estas de Vilanova tendrán más resolución. Cada una tendrá un coste de unos 2.200 euros que, junto al sistema de almacenamiento y multiplicados por las nueve primeras cámaras en proyecto, arrojan un presupuesto total de 43.784 euros, financiados con el Plan Concellos de la Diputación. Lo más caro, dijo Durán, ya está hecho: El desplegado de la fibra óptica necesaria, por buena parte del territorio. En los próximos meses se cubrirá también Baión, momento en el que las cámaras podrán ampliarse a esta parroquia. Esta primera fase colocará, como tarde antes del verano, cámaras en la PO-549, gran parte del centro urbano, principales accesos y la salida del puente de A Illa. En caso de delito en aquel municipio vecino, las entradas y salidas de vehículos por este su único acceso también podrían ser comprobadas judicialmente.