Los guardas del Palacio de Kensington, donde vive parte de la familia real británica, rehusaron la entrada a Samantha Markle, la hermanastra de Meghan Markle –en la foto–, cuando se presentó sin haber sido invitada, según “The Mirror”. Samantha, que padece esclerosis múltiple, se personó en su silla de ruedas pero no pudo entrar.