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jueves | 25 abril | 2024
Pasadas las tres de la tarde comenzó a arder el monte en A Riva, en la parroquia de Godos. No fue de forma accidental ni a consecuencia de las altas temperaturas. Fue intencionado, confirma el agente forestal desplazado al lugar. Un incendiario prendió fuego en el margen de una carretera, justo al lado de un grupo de viviendas. Las llamas subieron por un talud y acabaron quemando unos 4.500 metros de superficie arbolada, aunque finalmente no afectaron a las casas. “Nunca hubo peligro” para las viviendas, comenta el agente. La dirección del viento hizo que el fuego avanzase en sentido contrario y la propia carretera ejerció de cortafuegos. Lo que sí acabó perjudicado fue un depósito de agua existente en la zona, que quedó cercado por el incendio y su cubierta resultó dañada a consecuencia del fuego.
medios terrestres y aéreos
En las tareas de extinción participaron dos cuadrillas de tierra y una tercera que llegó a bordo de un helicóptero con base en O Campiño. Contaron con tres motobombas. Sobre las 17:30 horas el fuego ya estaba prácticamente extinguido y los brigadistas trataban de enfriar con agua el terreno para evitar que las llamas volvieran a reproducirse.
El de ayer en A Riva fue el segundo incendio que afectó a montes de la comarca en apenas 24 horas. El miércoles, también a primeras horas de la tarde, se declaró otro fuego forestal en Portas, en la zona de Parada, en el que ardieron cerca de dos hectáreas de superficie arbolada. Tampoco en este caso hubo peligro para los vecinos ni sus viviendas, que estaban más alejadas del punto del incendio, a unos 60 metros de distancia.
