CALDAS-Santa Rita, una mujer adelantada a su tiempo

La capilla de Campelo, en la parroquia de San Clemente, fue ayer punto de encuentro de los devotos de Santa Rita, que acudieron a venerarla durante toda la jornada. Desde las nueve de la mañana se sucedieron las misas en el pequeño templo. La solemne se ofició a la una del mediodía, seguida de procesión y cantada por la Coral Polifónica de Caldas de Reis. Paulino Sánchez, párroco en funciones, se dirigió a los “admiradores” de Santa Rita —así los definió— para describirla como “una mujer adelantada a su tiempo”. Maltratada por su marido, al que vio fallecer al igual que a sus dos hijos, se refugió en la fe y fue, en el siglo XV “una precursora de los derechos humanos” promoviendo la paz y la reconciliación entre enemigos.
Se la considera la patrona de las causas imposibles porque siempre defendió que “con fe, nada es imposible”. Sus fieles la agasajaron ayer en San Clemente con rosas, la rodearon de velas y realizaron ofrendas. Sobre todo monetarias, pero sorprendió también la de una gallina que pasó parte de la mañana en la sacristía. El sacerdote titular de la parroquia, Manuel Carreira, animó a algún feligrés a hacerse cargo de ella y la misión recayó en Mª Isabel Duarte. “Faime ilusión levala”, comentaba la mujer tras la procesión, mientras acariciaba al ave junto a su nieto. Hace años, recuerda, “facíanse poxas con galiñas, coellos” y otros animales que ofrecían los devotos, pero la práctica se prohibió a raíz de la irrupción de la gripe aviar.
A la salida de la misa, la Banda de Música Cultural de Barro amenizó la sesión vermú. Algunos bailes, la “chiquita” de rigor en el carro o las típicas rosquillas fueron el entretenimiento para quienes todavía se resistían a irse a comer. Por la tarde se retomaron las misas entre las 18 y las 20 horas. Y las honras a Santa Rita continuarán el sábado. A las 13 horas se celebrará una misa cantada cuyos gastos se cubrirán con las limosnas de los fieles. Por la noche las orquestas Players y Ritmo Joven actuarán en la verbena. Las fiestas, organizadas por una comisión presidida por José Touceda y Manuel Cobas, las financian los vecinos del lugar de Faramentáns.