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jueves | 25 abril | 2024
Los acusados de detención ilegal de la mujer y la asistenta de un narcotraficante negaron los hechos ayer ante la sección segunda de la Audiencia Provincial y respondieron tanto a las preguntas de sus letrados como a las del fiscal. La declaración principal fue la de M.S.M., cuyo ADN apareció en la nave industrial en la que supuestamente estuvieron secuestradas las dos mujeres. Algo que el acusado vinculó a una noche de sexo. “Estuve de fiesta por Cambados y Vilagarcía en agosto o septiembre”, es decir, unos meses antes de los hechos, producidos en noviembre de 2013.
“Consumí cocaína y alcohol”, dijo M.S.M., que reconoció un pasado de drogadicción ya superado. “Ahora tengo un trabajo”. Después, explicó a preguntas del ministerio público, continuaron de fiesta con otra pareja, que se quedó en un coche y “para no molestarles”, se fueron a una nave industrial cuya ubicación no recuerda y en la que “estuvimos haciendo el acto”.
Sin acusación particular
Los restos de ADN, que fueron cotejados con la base de datos policial, es la única prueba contra M.S.M. ya que tanto la colilla como el pasamontañas recogidos en la casa de las víctimas no ofrecieron ningún perfile genético. Asimismo, el frotis realizado en el volante del Audi robado y quemado posteriormente tampoco tuvo ningún resultado concluyente, según explicaron los peritos que intervinieron..
Los hechos que se juzgan ocurrieron el 20 de noviembre de 2013, cuando la mujer y la asistenta de José Ramón Dorgambide, más conocido como "el Panadero" y que en esos momentos se encontraba cumpliendo prisión por tráfico de drogas, fueron retenidas por dos asaltantes que, tras varias horas, se llevaron dinero y joyas, así como dos Audis, uno de los cuales apareció quemado.
Las denunciantes no se presentaron al juicio ni se personaron en la causa. El presidente del Tribunal, Juan José Barreiro, acordó que la vista continúe hoy, a la espera de que la policía judicial consiga localizar a ambas mujeres, a cuyo testimonio no renunciaron desde la defensa. El otro acusado, R.J.R., también negó los hechos y aseguró que solo estuvo en Arousa en una despedida de soltero.
