Amigos de Galicia contrata a un parado con 4 hijos gracias a una campaña benéfica

Amigos de Galicia contrata a un parado con 4 hijos gracias a una campaña benéfica
diego reinal es el nuevo repartidor de la fundación amigos de galicia g. salgado

La Fundación Amigos de Galicia acaba de contratar a un parado con cuatro hijos gracias al dinero recaudado con la campaña “Se vende una ilusión”, un total de 810 euros. Se trata de Diego Reinal, de nacionalidad uruguaya y vecino de Meaño, que realizará las tareas de repartidor. El colectivo que en O Salnés dirige Jesús Busto espera poder prolongar su colaboración, para lo que necesitan seguir vendiendo las mesas elaboradas por los usuarios del centro Con Eles, por los alumnos del colegio de Rubiáns y por las Mulleres Rurais de San Roque.
Y es que la gran mayoría del dinero recaudado procede de donaciones de patronos y particulares, ya que tan solo se vendieron dos mesas. El resto siguen en la sede de la Fundación que las vende por un precio de 50 euros. De entregarse todas, podría ampliarse la contratación de Diego Reinal, que ayer acudió a la nave de la Fundación durante el acto de presentación del balance de la campaña “Se vende una ilusión”.
Se trata de un usuario frecuente de Amigos de Galicia que tiene cuatro hijos, dos de ellos mellizos de seis meses de edad. Por ello, la Fundación decidió escogerlo como beneficiario de una campaña que tiene como objetivo la reinserción laboral de personas sin recursos o en situación de exclusión social.
No es la primera iniciativa de este tipo que pone en marcha Amigos de Galicia, que siempre puso el acento sobre las estrategias de promoción de empleo combinadas con otro tipo de medidas de apoyo a las familias que están pasando por un mal momento.
Además, la implicación de la Fundación con los niños procedentes de hogares sin recursos es total, y así se entiende el hecho de que hayan escogido como beneficiario al padre de dos bebés de seis meses y otros dos niños de corta edad. De hecho, cabe destacar que la contratación del vecino de Meaño se realizó incluso antes de alcanzar el objetivo económico que la Fundación buscaba con “Se vende una ilusión”, es decir, los 1.567,01 euros. Finalmente han sido tan solo 810, aunque ceba destacar que la mayor parte de las mesas siguen a la venta por lo que Amigos de Galicia anima a los vecinos de O Salnés a colaborar.

más iniciativas
Son muchas las campañas que pone en marcha la Fundación para ayudar a las miles de familias que atiende en la comarca de O Salnés. Una cifra que ha crecido y mucho en los últimos cinco años. Pero la subida de las cifras de paro va pareja con el aumento de la solidaridad. Por ello, cabe destacar el éxito de otra de las campañas puestas en marcha este año, “Dona un biberón”.
A través de esta iniciativa, destinada a los más pequeños de la casa, el colectivo recaudó un total de 98 botes de leche de primera lactancia, 10 chupetes, 13 tetinas, 11 botes de leche de continuación, 11 de cereales infantiles y cinco paquetes de pañales, asó como otros productos infantiles y más de 350 euros.
Estos donativos fueron entregados a 39 bebés de familias sin recursos de la comarca. Una cifra muy significativa pero menor si se tiene en cuenta que la Fundación atiende en O Salnés a un total de 300 niños que no han cumplido el año de vida.
Por ello, la implicación de la ciudadanía es muy necesaria para este colectivo. Sobre todo teniendo en cuenta la reducción de las ayudas de las administraciones, que ha sido una constante en los últimos años. La gran intensidad del trabajo que ha conllevado la oleada de peticiones de ayudas ha obligado a la Fundación a profesionalizarse y a cambiar de sede. En estos momentos tienen una nave al lado de la Estación de Autobuses, con una superficie mayor.
Además, mantienen la nave de Fontecarmoa, donde se encuentra la lavandería de la Fundación. A través de este servicio, Amigos de Galicia ha contratado a mujeres víctimas de malos tratos, así como a personas sin recursos.
Y es que la labor del colectivo, que en un principio nació con una vocación cultural, se ha ido transformando con la coyuntura económica, que les obliga a prestar un importante respaldo a los servicios sociales de los ayuntamientos, que derivan buena parte de los casos que les llegan a asociaciones benéficas como la propia Amigos de Galicia, Cruz Roja, el Club de Leones o Cáritas, con las que en Ravella tienen firmado un protocolo. n

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