Bajos precios, largas colas y los topes cubiertos en el inicio del libre marisqueo

Decenas de barcos se echaron ayer al mar de Arousa en el primer día de campaña del libre marisqueo, una de las más importantes del año para el sector de la Ría. La climatología adversa que se vivió en la comarca a lo largo de toda la mañana no desanimó a los rañeiros que acudieron en masa a las zonas de O Bohído, Cabío y, sobre todo, Os Lombos. De hecho, y según los datos oficiales facilitados por la Consellería do Mar, fueron 633 las embarcaciones registradas para el libre marisqueo. De ellas 80 en la zona de O Bohído, 422 en Os Lombos, 50 en Cabío y 81 en otras zonas.

Las expectativas generadas en los últimos días respecto del producto que se iban a encontrar los rañeiros en el libre marisqueo se cumplieron, aunque solo en parte. El patrón mayor de Cambados, Ruperto Costa, apuntó tras el primer día de campaña que los precios que alcanzaron los productos en lonja fueron “baixísimos, moi malos”. Una valoración que también comparte su homólogo en A Illa, Juan José Rial Millán. “Os prezos non son moi bos, non”.

Los dos responsables, que están en la asociación Rañeir@s que se ocupa de la gestión este año de las zonas de libre marisqueo, manifiestan respecto a la cantidad de marisco que “se cumpriron os topes, pero pensabamos que iba a haber máis berberecho do que se percibe”. Unas dos toneladas de este bivalvo que estuvo desaparecido durante años en la Ría de Arousa y que, pese a que se esperaba más, ha sabido a gloria entre los rañeiros. Aún así los precios oscilaron entre los 6 y los 3 euros kilo en las rulas.

“Nos Lombos cumpríronse os topes en berberecho e japónica. A fina e a babosa é moi pequena”, explica Rial Millán. Añade además que “no Bohído os topes de babosa moi ben, pero a fina e a japónica hai pouca” y concluye que la zona de Cabío fue “un auténtico desastre”. No obstante los representantes del sector esperan que la campaña mejore a medida que pasen los días, al considerar que la primera jornada es demasiado pronto para hacer una valoración completa.

Largas colas en el control

La primera jornada de libre marisqueo también se caracterizó por las larguísimas colas en los puntos de control en batea. “Había dúas pesas, moita xente pasouse do tope e a maioría achegouse á mesma hora ao punto de control. É normal que se producisen esas colas”, explica Ruperto Costa. Eso sí, intentarán que hoy mismo se reduzcan instalando una tercera pesa. Rial Millán aseguró que con el sistema de tarjetas “a cousa dende logo vai máis rápida que co sistema de bolígrafos. O das colas ao haber tal cantidade de barcos sobre todo nos Lombos é inevitable”.

Y es que bien es cierto que hubo rañeiros que tuvieron que esperar durante dos horas y media a que su producto fuese pesado. Una situación que esperen que mejore con el avance progresivo de la campaña.