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miércoles | 24 abril | 2024
El 17 de marzo a las doce de la mañana se celebrará el Pleno extraordinario en el que Partido Popular y Partido Socialista desalojarán al nacionalista Xoán Castaño de la Alcaldía de Catoira. Lo hacen tan solo nueve meses después de que los votos de los tres ediles conservadores permitiesen un gobierno nacionalista y tras advertirlo en más de una ocasión durante las últimas semanas. Ayer, a la una de la tarde y en el salón de plenos en el que se ejecutará el golpe de timón, el conservador Iván Caamaño y el socialista Alberto García comparecían para “argumentar” una decisión que ya ha tenido sus primeras reacciones en las cúpulas de sus formaciones políticas. Y es que, ni PP ni PSOE a nivel Galicia apoyan los movimientos dirigidos por sus representantes en las localidades vikingas.
Aún así la moción de censura firmada por los cinco ediles socialistas y por los tres conservadores se presentó ayer a primera hora en el Concello. Esos mismos concejales firmaron un pacto de gobierno de coalición que García y Caamaño desgranaron en primera persona.
Así pues tras el Pleno extraordinario del día 17 el también exalcalde, Alberto García, volverá a la Alcaldía catoirense. Lo hará durante la primera parte de lo que resta de mandato y con Iván Caamaño en la tenencia de Alcaldía gobernando “man a man”. El último año y medio de este mandato, hasta 2023, el alcalde será el líder conservador y el teniente de alcalde el socialista. El gobierno estará conformado por los ocho concejales de los dos grupos que se repartirán unas áreas que todavía están por determinar.
Los dos políticos manifestaron que tanto Caamaño como García estarán liberados, pero dicen que se “aforrarán arredor de 20.000 euros respecto do que nos vale agora o goberno dirixido por Xoán Castaño”.
Fue Alberto García el que expuso la idea de que este pacto entre dos formaciones consideradas absolutamente contrarias responde “á necesidade de restaurar a democracia” en el municipio. Manifestó que PP y PSOE a nivel local suman el 70 % de los votos y criticó abiertamente al gobierno de Castaño señalando que “non se pode gobernar con tres concelleiros e tampouco se pode gobernar a golpe de decreto e non executar os acordos aos que se chega no Pleno”.
Tanto él como Caamaño aseguran que es una decisión en la que “antepoñemos aos veciños de Catoira” ante cualquier directriz dada por las direcciones de los partidos a los que representan que ya han decidido abrirles expediente. “O PP estaba avisado da moción. A nós corríanos présa pola situación na que se atopa o Concello. Non me gustaría a expulsión, porque son do PP, pero se o partido o considera asumireina”. Una actitud similar a la mostrada por Alberto García. “Levo case 50 anos militando no PSOE e non me afectan xa as expulsións. Penso que a agrupación local ten, e debe ter, autonomía para tomar este tipo de decisións sen que haxa intromisión do partido”, manifiesta el socialista.
En este golpe de timón sorprende, y él es consciente de ello, el giro dado por el PP de Caamaño que hace tan solo nueve meses erigía a Castaño como alcalde. “Sei que hai xente que nos pode criticar. O PP démoslle unha oportunidade ao BNG que non quixo aproveitar. Non quixo dialogar nin cumprir e está facendo o que a el lle dá a gana con tres concelleiros, nun concello baleiro que non atende á xente e cometendo os mesmos erros que antes criticaba”, manifiesta el conservador. Añade además que “nós non podemos permitir que o Concello estea parado. Este cambio cremos que vai ser positivo e moi democrático, porque é moi democrático que dous partidos se unan”.
Por el momento podo se ha avanzado de los acuerdos programáticos acordados por los dos líderes locales para Catoira. “Aceras, asfaltado, contratación de traballadores, mocións que se apoiaron conxuntamente e que o BNG non quere cumprir. Teremos a oportunidade agora de facelas para que dentro de tres anos e tres meses poidan volver a decidir qué é o mellor”, manifestó Caamaño. Ambos incidieron en varias ocasiones que “sempre imos poñer Catoira por diante de calquera partido e por encima de calquera circunstancia”.
Lo cierto es que la alianza del PSOE y del PP en Catoira crea un precedente inédito en las comarcas arousanas con el gobierno de coalición de dos formaciones antagónicas históricamente y de vectores muy distintos.
