Los celadores valorarán otras acciones para reforzar la plantilla

Los celadores del Hospital do Salnés pusieron ayer punto y final a las dos jornadas de huelga previstas para denunciar unos servicios mínimos continuos en el centro de Ande. Un paro discreto en sus efectos, pero efectivo en cuanto al mensaje a la ciudadanía. “Hemos conseguido que la gente se entere del problema de los celadores y hemos logrado su apoyo”, apuntaba ayer Rosa Casal, de UGT.
Pero también advierte que este es el principio de una lucha que acaba de empezar. “Nos reuniremos esta semana, valoraremos este paro y decidiremos qué acciones acometer de ahora en adelante. Esto no ha hecho más que empezar”, advierte Casal.
Los celadores reclaman un refuerzo de la plantilla. En la actualidad son 18, pero aseguran que se quedan escasos para los turnos y que la gerencia echa mano de una persona tres días a la semana “para cubrir los turnos”. Esta plantilla lleva sin incrementarse desde 2008, a pesar de que, en ese momento, un estudio realizado sobre el personal necesario para una atención óptima apuntaba la contratación de 35. Desde entonces, se han incrementado las tareas, las especialidades e incluso una planta, pero la plantilla de celadores sigue siendo la misma.