El enfrentamiento entre un camionero y las trabajadoras de Cuca acaba en los juzgados

El enfrentamiento entre un camionero y las trabajadoras de Cuca acaba en los juzgados
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El tenso enfrentamiento vivido entre las trabajadoras de Cuca y un camionero durante una de las jornadas de guardia en el exterior de la fábrica acaba en los juzgados por una denuncia cruzada. Hasta siete trabajadoras prestarán declaración por los hechos mañana, pasado y el próximo lunes, pero también lo hará el conductor del camión al que las operarias acusan de amenazas y de una actitud agresiva. Por su parte, el camionero ha denunciado a las operarias por impedir la retirada de una máquina de la nave y también prestará declaración en estos días.
No es la única notificación que están recibiendo las trabajadoras de Cuca, también han comenzado a recibir citaciones por las denuncias interpuestas por la empresa por impedir la salida de la maquinaria de la nave de Vilaxoán.
Mientras tanto, miembros del comité de empresa de Cuca acudirán también a la vista del próximo 19 de junio en calidad de testigos. Y es que a pesar de que después de que el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia ratificase el fallo del Juzgado de lo Social que insta a Garavilla a reanudar la actividad en Vilaxoán y el gerente de Garavilla se dirigiese a la plantilla de Cuca tendiéndole la mano al diálogo, pocas han sido las muestras de la firma en este sentido. Garavilla ha ordenado a las trabajadoras tras el fallo que fichen en la fábrica de Vilaxoán y que después un autobús las traslade a O Grove.
La empresa responde de esta forma a la última sentencia emitida por el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia, que obliga a Garavilla a retomar la actividad de Conservas Cuca en Vilaxoán. Para la plantilla la decisión no convence porque no es lo que reclaman. 
La medida introducida por Garavilla y que es calificada por la plantilla como una burla de la ley, supone incluir el viaje desde Vilaxoán hasta O Grove dentro del horario laboral. De esta forma el servicio de transporte es gratis y la empresa da a entender que el centro de trabajo es Vilaxoán. Mientras esperan a que haya un pronunciamiento sobre si la compañía ha de devolver la maquinaria a las instalaciones de Vilaxoán, las trabajadoras también están pendientes de que en la Consellería do Mar les conceda una reunión, cita para la que por el momento no hay fecha. 
Por su parte, Garavilla cree que con el sistema de fichaje de las trabajadoras de Cuca en Vilaxoán y el pago de las indemnizaciones ha cumplido ya con la sentencia del Juzgado de lo Social que dio la razón a la plantilla. Entre los planes de Garavilla no está previsto reabrir la vieja nave de Pita. n

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