Los horarios del bar del centro social de Vilaxoán vuelven a colocarlo en el centro de la polémica

Los horarios del bar del centro social de Vilaxoán vuelven a colocarlo en el centro de la polémica

El bar del centro social de Vilaxoán vuelve a ser motivo de conflicto, en esta ocasión por una cuestión laboral. Francisco Cochón denuncia que pese a “ter gañado a concesión e a explotación do bar”, se le ha despedido de forma injusta por “coacción dos membros da asociación de veciños”. Cochón asegura que en el proceso de adjudicación de la explotación del bar promovida por la Asociación “eu non fun o titular do contrato, senón a rapaza que traballa alí de camareira, pero si que fun o que dotou a zona de mobiliario e xestionou todo”. Apunta en este sentido que esta misma semana “atopeime conque me despedían”, un acto que atribuye no a su jefa, sino “á presión que exerceron os da asociación porque eu non lles pasaba polo aro en moitas cousas”. Se refiere fundamentalmente Cochón a los horarios. “No contrato que se firmou hai uns meses acordamos que o horario do bar ía ser de dez da mañá a dez da noite en horario de inverno, e ata as 11 da noite en horario de verán”, explica. Unos argumentos que coinciden con los aportados por la propia Asociación de Vecinos consultada ayer tarde sobre este asunto.
En este sentido el ahora despedido apunta que “cando se facía algún tipo de evento podía quedar ata un pouco máis tarde e teño quedado ata as 12 ou así, porque se hai fútbol non vas botar á xente fóra”.
“Ata as dúas da mañá”
La versión esgrimida por Francisco Cochón difiere de la aportada por la Asociación de Vecinos. Desde la entidad apuntan que el problema no tiene nada que ver con ellos sino que se trata “de un asunto laboral no que unha xefa despediu a un traballador”. A mayores reconocen que sí existían problemas importantes con el tema de los horarios. “Nós temos que poñer o horario que nos estipula o Concello, porque non é un local privado, senón que é un centro social no que se teñen que cumprir unhas horas”, indican. En este sentido manifiestan que “non se estaba facendo, senón que temos pasado por alí algún membro da asociación e estar o local aberto un sábado ás tres da mañá e iso non se pode consentir”. Apuntan que “é un problema laboral, entre eles, pero é certo que o tema dos horarios non se estaba cumplindo”.
Francisco Cochón ve la situación desde un punto de vista diferente y entiende que “eu gañeime os clientes, fixen o abono para os partidos do fútbol e aquelo ía gañando vida e agora danme a patada”. De hecho no descarta emitir una denuncia, para lo que ya se está informando.
Pendientes del Reglamento
Lo cierto es que la explotación de la cafetería-bar del centro social ubicado justo frente a la playa de O Preguntoiro es “provisional”. Cabe recordar que la concesión la otorgó la Asociación de Vecinos para solventar la falta de personal durante semanas en el centro, según ellos mismos explicaron en rueda de prensa, dado que la persona que explota el bar es la encargada de abrir y cerrar las instalaciones.
    Y es que la gestión de servicios como el que hay en Vilaxoán o en el centro social de Rubiáns está pendiente de la aprobación del Reglamento de Usos Culturales que todavía no se ha llevado a Pleno. Es precisamente en ese documento donde se estipulan qué condiciones tiene que haber en la gestión y en la concesión de este tipo de servicios ubicados en locales públicos.l

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