La jueza dice que el cierre de Cuca en Vilaxoán es una “decisión empresarial”

La magistrada del Juzgado de lo Social Número 2 de Pontevedra señala que el cierre de la planta vilaxoanesa es \“una decisión empresarial cuya conveniencia no corresponde valorar a esta jurisdicción salvo que repercuta negativamente en los derechos de los trabajadores\” y puntualiza \“como sí ocurría en el momento en el que fue dictada la sentencia\”.
La jueza encargada del \“caso Cuca\” considera que Garavilla cumple con la sentencia porque en la actualidad \“facilita a las trabajadoras el traslado a O Grove sin coste alguno y asume además que el tiempo de traslado (más de una hora diaria) es dentro del horario laboral\”. Enmarcado, entonces, el traslado como una decisión empresarial \“que no supone cambio de domicilio no produce ninguna violación de los derechos de los trabajadores, que era lo que se pretendía con la sentencia de 31 de mayo de 2013\”. Si bien la magistrada reconoce en el auto que no se ha vuelto a prestar servicios en el centro de Vilaxoán \“en ningún caso puede esta juzgadora, como así pretenden las trabajadoras, ordenar al empresario la reapertura de un centro de trabajo que se encuentra cerrado\”.
En cuanto al cambio de jornada partida por continuada en O Grove, la jueza señala que \“es un hecho que no ha sido tratado en el procedimiento principal del que esta ejecución deriva, por que lo que no puede ser resuelto en el presente incidente sino en el procedimiento correspondiente de modificación sustancial de condiciones de trabajo que como así consta documentalmente ya ha sido presentado\”.
En cuanto a la parte económica, también ha resultado probado que después de haber sido dictada la sentencia por el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia, la empresa comunicó a las trabajadoras que procedía a dejar sin efecto el traslado llevado a cabo en enero de 2013, y comunicándoles el nuevo sistema de trabajo: Comenzar la jornada laboral en Vilaxoán a las seis de la mañana, donde se cambiarían de ropa, para después ser trasladadas en autobús hasta la fábrica de O Grove en donde realizarán su trabajo hasta las 13.40 horas. Será a esa hora cuando un autobús las recoja y las deje en Vilaxoán para finalizar la jornada laboral. Una decisión que en ningún caso satisface a las trabajadoras y así lo han dejado claro tras enterarse por otros compañeros de la fábrica. \“Non entendemos nada\”, comentó la presidenta del comité de empresa, María José Rey.
Un varapalo no solo ara la plantilla de Cuca sino también para el municipio vilagarciano que podría perder una de las fábricas más emblemáticas de la ciudad. De hecho, el alcalde Tomás Fole tiene previsto reunirse con los portavoces de la Corporación municipal para abordar la sentencia y decidir qué acciones llevar a cabo.
Siguen pendientes todavía las denuncias interpuestas por varias trabajadoras del comité de empresa pro \“supuestos abusos de autoridad de la empresa\” después de descontarles días de libre disposición o permisos para acudir al médico. n