La jueza valida fichar en Vilaxoán como cumplimiento de la sentencia de Cuca

El juzgado de lo Social ya se pronunció sobre la particular interpretación que Garavilla ha hecho del cumplimiento de la sentencia. La jueza que, en un primer fallo judicial, obligó a la empresa a reponer a la plantilla de Vilaxoán en las condiciones de trabajo anteriores a que se decretase el ERE, da por válido el fichaje en Vilaxoán y el traslado de las trabajadoras en autobús hasta O  Grove. Con esta medida, la empresa incluye las dos horas del trayecto dentro del horario de la jornada laboral.
La noticia corría ayer como la pólvora entre las operarias de Cuca y pese a desconocer el contenido íntegro del fallo, no ocultaban su decepción. “Estamos moi tristes. Non entendemos qué lle pasoua a xueza despois de darnos a razón e agora dalla á empresa”, señaló la presidenta del comité de empresa de Cuca, María José Rey.
Será el lunes cuando dispongan de la sentencia y cuando analizarán con detalle el contenido de la misma, previsiblemente en una asamblea, pero ya adelantan que recurrirán el fallo emitido por el Juzgado de lo Social. “Nós seguiremos defendendo a actividade industrial en Vilaxoán. Consideramos unha burla da xustiza que se fiche en Vilaxoán para logo traballar no Grove”, afirmó ayer María José Rey. Garavilla evitó ayer pronunciarse sobre la sentencia después de defender durante los últimos meses que con las “nuevas condiciones organizativas” daba por cumplido el fallo. Garavilla aseguró durante el último incidente judicial que reabrir la planta de Vilaxoán “con todas las garantías sanitarias, productivas y medioambientales” supondría una inversión de cuatro millones de euros. Una cifra  “inasumible” en estos momentos en los que las pérdidas en los últimos dos años alcanzan los 10,7 millones de euros.
Pese a este nuevo panorama que no parece favorable para las trabajadoras, la plantilla aún tendrá algo que decir y no se descarta que retomen las movilizaciones. “Temos que ver o que imos a facer”, dice Rey
Y es que desde hace meses llevan luchando contra esta decisión de la empresa con concentraciones en la planta vilaxoanesa y en la delegación de Mar e incluso con una manifestación que contó con el apoyo de la Corporación y de muchas fuerzas sociales de la ciudad.
El conflicto laboral de Conservas Cuca comenzó hace un año y medio, y en el camino las trabajadoras se han volcado en luchar duro para que Garavilla recapacitase y frenase el traslado de la maquinaria y de la plantilla a O Grove, pero no lo lograron. Llevaron el conflicto a los tribunales, que fallaron a favor de la plantilla. La empresa recurrió y el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) volvió a ordenar la reposición de las trabajadoras en su situación inicial. Entonces fue cuando el grupo conservero fletó un autobús para las operarias desde Vilaxoán, donde continúan fichando a día de hoy.
Pese a que en un principio todo hacía indicar que la justicia iba a volverles a dar la razón, no ha sido así y pese a la decepción inicial, la plantilla preparará un nueva ofensiva. n