11º-22º
martes | 16 abril | 2024
Miguel Alves Lago acudió ayer al Juzgado de Vilagarcía para responder por las acusaciones vertidas contra sus antiguos compañeros, los ediles de EU Jesús López y María Mosquera, de los que dijo en su blog que se habían quedado con 20.000 euros.
Estas acusaciones acabaron con la paciencia de los concejales izquierdistas, que pidieron el amparo de los tribunales ante lo que consideran una injuria. Acusaciones que todavía se pueden leer en el blog, en el que se recoge, en referencia a Mosquera y López, que “pechastes a Sede con premeditación, alevosía e nocturnidade (sábado as 11 da noite cámbiastedes a pechadura) e quedarvos con todo o material que non é deste grupo municipal e con 20.000 euros”.
El contenido del artículo fue ratificado por Alves en los juzgados vilagarcianos. El no adscrito se negó a rectificar, tal y como solicitaron los ediles de EU, que como opción alternativa plantearon una indemnización.
Ayer se celebró una vista de conciliación que se saldó sin ningún tipo de acuerdo, lo que aboca a Alves a un más que probable regreso a los juzgados en caso de que López y Mosquera presenten una querella, que se tramitaría por la vía de lo Penal.
Un largo conflicto
El conflicto con Miguel Alves se inició hace ya casi año y medio, cuando el edil rompió la disciplina de voto. Tres días después comparecía públicamente y respaldado, entre otros, por Ramón Bueno, emitía graves acusaciones contra el portavoz, Jesús López. El aparato del partido desembarcaba poco después en Vilagarcía apoyando la figura de López y su equipo y advirtiendo de que habría consecuencias si el desafío no cesaba.
No es la primera vez que el portavoz advierte, ante las acusaciones vertidas por estas personas, de que de no cesar en su actitud no le quedaría otra opción que recurrir a los tribunales.
Finalmente no solo él, sino también su compañera en el grupo municipal, se han visto obligados a recurrir a los juzgados ante una acusación que se hizo en un blog con difusión a través de las redes sociales.
Miguel Alves Lago llegó a la Corporación en enero del año pasado. La marcha de Juan Fajardo y la renuncia de las seis personas que se encontraban por delante de él, que iba de número 9 en la lista a las elecciones municipales de 2015, encumbraron a Alves a la Corporación.
Bastaron seis meses para que cobrara protagonismo por votar de forma contraria a sus compañeros de filas y permitir así al gobierno aprobar la ordenanza de terrazas.
Estalló entonces, en el seno de Esquerda Unida de Vilagarcía, un conflicto que en realidad llevaba meses latiendo y que llevó a la dirección nacional a desembarcar en el municipio. Desde el primer momento, el secretario de Organización, Rubén Pérez, mostró su apoyo a Jesús López. Finalmente, en abril, Alves fue expulsado de EU junto a Ramón Bueno.
