Mar convoca a la Mesa do Mexillón y a Anfaco para abordar los criterios de evaluación de las toxinas

La Consellería do Mar ha convocado para mañana miércoles a las 18.30 horas a los productores con representación en la Mesa do Mexillón y a la patronal conservera para abordar los criterios empleados en la evaluación de toxinas. Esta cita se enmarca dentro de la ronda de contactos iniciada ya la semana pasada por separada con ambos sectores con actividad mejillonera.
Y es que pese a que el Intecmar emplea en sus analíticas los dos métodos de referencia a nivel europeo, tanto los productores pero especialmente los transfomadores llevan demandando desde el inicio de este episodio tóxico una revisión de este sistema de control de toxinas.
Anfaco ya ha asegurado en muchas ocasiones que la actual norma sobre toxinas no permite trabajar con seguridad. La exigencia del mismo nivel de toxicidad para el bivalvo fresco que procesado está generndo muchos problemas, ya que al cocerlo y deshidratarlo el nivel aumenta. Lo que se pretende y así se ha trasladado a la adminitración es que lo que se exija sea un nivel equivalente. De tal forma que las fábricas o los cocederos no se encuentren con que compran bivalvo en un polígono abierto, sin toxina, y que cuando lo procesan sí dé positivo por marea roja y no pueda llegar a envasarse como ya han denunciado varios cocederos.
El sector transformador incluso se ha ofrecido a colaborar con la administración en el cambio de esta normativa con su plantilla de técnicos y también con sus mecanismos en la detección de toxinas. Los productores, por su parte, ya han mostrado una vez más su oposición al método químico durante la última Mesa do Mexillón y la necesidad de un cambio que permita trabajar con normalidad y sin sorpresas de última hora.
La administración autonómica ha tomado nota de las peticiones de ambos sectores y ha decidido convocarles a una reunión en la que se tratarán de unir posturas y hacer un frente común que permita un cambio en Bruselas. Algo que se antoja complicado, pero no imposible y que podría unir por primera vez y sin fisuras a la industria y a la producción.
El sector del mejillón cierra un año negro y el comienzo no ha sido mucho mejor, ya que pese a la apertura de ya una buena parte de los polígonos bateeiros, gran parte de la producción se ha desplomado y las pérdidas acarreadas a lo largo del pasado ejercicio todavía pesan en las cuentas de los productores de molusco. Muchos están a la espera de las ayudas que Mar anunció en el último encuentro y que forman parte del presupuesto que Bruselas destina a las comunidades por pérdidas en la producción por toxina. n