10º-17º
jueves | 25 abril | 2024
El Combate Naval, uno de los eventos piriotécnicos más importantes de Galicia, con 150 años de historia a sus espaldas, celebró edición número 151 respaldado por un amplio público. Generaciones enteras de vilagarcianos se dieron cita en los arenales para disfrutar de un espectáculo de 22 minutos que, a muchos, se le hicieron corto. Durante ese tiempo pudieron ver como los fuegos iluminaban mar y cielo...
600 kilos de pólvora
Los números hablan por sí solos. Tres embarcaciones y un castillo lanzaron, en cinco mil disparos, 600 kilos de pólvora que adquirieron diversas formas
Y es que este siglo y medio de vida ha servido al Combate para actualizarse y hacerse al lenguaje de la nueva era tecnológica. Por ello, en el cielo pudieron verse de nuevo figuras de corazón y caras sonrientes como las que se utilizan en las redes sociales o en el wasap. Ambas figuras llegaron al espectáculo con la introducción de la gama pastel.
Fuegos aéreos se combinaron con los acuáticos y también con los que se lanzaron en tierra desde carcasas, baterías y velas romanas. Pirotecnia Penide fue la encargada, un año más, de hacer disfrutar a pequeños y mayores. Los más cómodos optaron por llevarse sillas para no perderse ni un solo detalle.
El castillo reprodujo las dimensiones del año pasado, cuando pasó a medir 30 metros de longitud por 12 de alto. También se mantuvieron las tres embarcaciones que se instauraron en el 150 aniversario del evento.
La gran traca de fuegos voladores puso punto y final a un evento que mantiene la magia y la esencia que lo convierten en uno de los espectáculos pirotécnicos más vistos. A Vilagarcía se acercaron ayer vecinos de otros municipios. Para velar por la seguridad de todos, efectivos de la Policía Local, Emerxencias, Policía Nacional y otros cuerpos trabajaron sin descanso en un dispositivo diseñado para el evento.
