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jueves | 25 abril | 2024
La nueva directiva de la Comunidad de Montes de Rubiáns sigue adelante con el proyecto de ampliación del cementero. El empuje definitivo a esta actuación ya está en marcha, ya que antes es necesario hacer la regularización del camposanto, un trámite al que obliga la nueva ley de Policía Mortuoria.
Un simple trámite tras lo cual se procederá a la presentación del proyecto del cementerio para solicitar la preceptiva licencia de obra en el Concello.
La actuación será promovida por el Arzobispado y, una vez concluyan los trabajos, será la Comunidad de Montes la usufructuaria, durante quince años, del cementerio parroquial.
La nueva directiva de la entidad, presidida por Ramón Fernández, da continuidad así al proyecto iniciado durante el mandato de Xurxo Abuín, y concede el empuje definitivo para que pueda salir adelante una actuación muy demandada por los vecinos.
De hecho, en su momento llegó a haber una importante lista de demandantes de nichos, aunque los trámites se demoraron tanto que ahora sería necesario actualizar el registro de peticionarios.
En cualquier caos, la Comunidad de Montes apuesta también en este mandato por continuar con una actuación que fue abordada en varias ocasiones en asamblea, y que hace unos meses recibió el apoyo de los socios.
Convenio
Fueron varios los cambios que fue necesario realizar para poder dar salida a esta demanda. La anterior directiva tenía el objetivo de poner en marcha un cementerio civil, para lo que sería necesario hacer una obra nueva aunque sobre terrenos anexos a los que acogen el actual camposanto.
Sin embargo, la nueva normativa de Policía Mortuoria impide que existan construcciones en los cementerios. Como existían pequeñas construcciones era imposible optar por la obra nueva, por lo que se regresó a la vía de la ampliación, sobre terrenos de la Iglesia.
En este sentido, se aprobó un convenio con el Arzobispado, que será el que promueva las obras para, una vez concedido la licencia, ceder el usufructo a la Comunidad de Montes durante quince años.
Será mediante la venta de parcelas como los comuneros esperan recuperar al menos parte de la inversión, que la anterior directiva cifró en unos 70.000 euros.
Una vez estén finalizados los trabajos, el cementerio parroquial de Rubiáns duplicará su capacidad. La ampliación se realiza sobre unos terrenos de 1.870 metros cuadrados, una superficie mayor que la que hay en la actualidad, incluso si se suma la ampliación realizada en la década de los 60.
Por ello, la intención es que con esta solución el cementerio quede listo al menos para unas cuantas décadas más. A lo largo de estos años, la Comunidad de Montes de Rubiáns realizó numerosos trámites para sacar adelante la obra. Ahora, la directiva de Fernández le da el que parece el empuje definitivo.
