La nueva Praza de Galicia recupera el corazón de la ciudad para los peatones

La nueva Praza de Galicia recupera el corazón de la ciudad para los peatones
Vista aérea de la nueva Praza de Galicia, cuyo diseño emula el cauce de un río dando protagonismo al agua y a la flora fluvial | gonzalo salgado

El corazón de Vilagarcía es ya territorio exclusivo de los peatones. Las vallas de obra fueron retiradas y la Praza de Galicia estrenó ayer un diseño firmado por el arquitecto Mariano Vázquez y que es la apuesta urbanística más potente del gobierno socialista de Alberto Varela.
Desde ayer mismo este enclave del centro urbano muestra el “modelo de ciudad” pregonado por el ejecutivo del PSOE desde el inicio de mandato. De hecho la Praza de Galicia no es más que el inicio de un proceso que continuará por la Praza da Independencia, García Caamaño o el entorno de Matosinhos en proyectos que están ya encaminados, según han referido desde Ravella.
El estreno de la nueva Praza de Galicia no fue al uso ni contó con corte de cinta. Fue un estreno abierto al público y aderezado por una exposición fotográfica que cuenta la historia de este mítico enclave desde que estaba incluso cubierto por las marismas hasta principios del siglo XIX. Algunos de los transeúntes, muchos al ser el sábado un día de mercado, se agolpaban en torno al estanque central para sacarse una foto con la nueva fuente. Y es que el agua es, con diferencia, la protagonista de la nueva obra.
“Recuperar espazos”
Todos los miembros del gobierno, así como concejales de algunos de los grupos de la oposición, asistieron a la apertura al público de la Praza de Galicia. A Vilagarcía también acudió la presidenta de la Diputación, Carmela Silva, que defendió el modelo de ciudad peatonal porque “hay que recuperar los espacios públicos para la gente y construir pueblos y ciudades para las personas”. Silva manifestó además su querer por la nueva obra que definió como “un espacio que habla de la historia de Vilagarcía, para que no se olvide ni lo bueno ni lo malo y para que los errores no se vuelvan a repetir”.
     Desde el punto de vista más pragmático también hizo referencia al hecho de que la obra, que emula el cauce real de un río con canalizaciones artificiales, pueda solventar los problemas de inundaciones que sufre este entorno cada vez que llueve. Sin olvidar, en todo caso, que todo este espacio era antiguamente una marisma y que la propia Rey Daviña era atravesada por un río.
     El alcalde, Alberto Varela, ratificó las palabras de la presidenta de la Diputación y agradeció el trabajo realizado por la edila de Urbanismo, Paola María Mochales. Incidió en que “cada tempo histórico ten as súas debilidades, pero agora temos claro que no século XXI o primeiro teñen que ser as persoas e por iso apostamos por este modelo de cidade”.
     El primer edil matizó que “era unha aposta que, ata que a ves concretada, pois non podes valorala de todo e a min, personalmente, encántame”.
     El regidor socialista destacó los espacios verdes y el agua. “Antes aquí había mar e ao final a auga sempre acaba volvendo ao mesmo sitio do que saiu”. Todo el espacio del agua se ilumina por las noches y la fuente tendrá sonido en ocasiones puntuales. l

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