Un operativo contra el furtivismo se salda con 37 denunciados en Cortegada

Un operativo contra el furtivismo se 
salda con 37 denunciados en Cortegada
Un agente de la Policía Nacional adscrita a la Xunta de Galicia durante el operativo | a. caeiro

Un operativo por mar y tierra contra el marisqueo ilegal se saldó ayer con 37 presuntos furtivos denunciados en Carril. Se encontraban faenando en la zona de Cortegada cuando fueron interceptados.

El dispositivo conjunto, en el que participaron la Policía Nacional adscrita a la Xunta de Galicia, el Servicio Marítimo de la Guardia Civil y el Servizo de Gardacostas.


Los agentes identificaron y denunciaron a un total de 37 personas por marisqueo ilegal y se incautaron de 155 kilos de distintas especies, entre berberecho y almeja japónica, fina y babosa. El marisco fue resembrado en la misma zona.

Además, los agentes también se incautaron de una cantidad importante de útiles compuesta por siete raños, 12 sachos, 6 ganchelos, 14 calderos, cuatro capachos, tres rastrillos y un flotador.
Un problema que resurge


Fuentes de la Consellería do Mar indicaron que se trató de un operativo conjunto por mar y tierra contra el marisqueo ilegal. La administración autonómica intensificó en los últimos años su lucha contra el furtivismo, un problema que afecta tanto a las personas que siguen los cauces legales, como a los propios recursos marisqueros de la Ría de Arousa y al propio consumidor, que no ve así garantizada la trazabilidad del producto.


Por ello, las campañas de la Xunta también se centran mucho últimamente en este último eslabón, el del destinatario del marisco, para evitar que se compre fuera de los mercados legales.
Además de las incautaciones, los efectivos que participaron en el operativo también se pasaron ayer por la zona de la playa, donde trabajan mariscadores con permisos, y llevaron a cabo un control de la actividad.


Los patrones arousanos denunciaron hace escasas semanas que el furtivismo se estaba rearmando, y que incluso se detectaba la presencia de grupos organizados. El patrón mayor de Rianxo, Miguel Ángel Iglesias, pedía a finales de febrero contundencia contra este tipo de prácticas, que en la zona norte de la Ría están unidas además a episodios de violencia. En este sentido, lo que reclaman los responsables de los pósitos es que los operativos policiales se completen con sentencias firmes ejemplarizantes, que sirvan para ahuyentar a los furtivos.

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