El PP inicia el contacto con la Ejecutiva de IVIL para una candidatura conjunta

El Partido Popular de Vilagarcía ha tomado buena nota del mensaje que lanzaron los militantes de IVIL tras la tensa asamblea del lunes y ya ha iniciado los contactos con la Ejecutiva de la formación independiente de cara a concurrir en una candidatura conjunta en las elecciones municipales.
Así lo confirmaron desde la dirección de la formación independiente que en cualquier caso someterá todos los pasos que se den a la decisión asamblearia de los militantes de IVIL.
Serán ellos los que tengan la última palabra sobre una candidatura conjunta que, en cualquier caso, deberá elaborarse en cuestión de días. Son varias las voces dentro de IVIL que cuestionan las negociaciones llevadas a cabo hasta el momento y que llevarían a Leticia Rivera, hija del fundador de la formación independiente y hoy senador del PP, directamente a los puestos de salida.
Sin embargo, las conversaciones se tensaron este fin de semana debido, según fuentes de la formación que ostenta el gobierno en Vilagarcía, a que las peticiones por parte de la militante de IVIL eran muy elevadas. A ello hay que sumar el malestar que causa entre buena parte de los militantes del partido independiente el hecho de que no se respete el orden de la lista que se presentó en 2011 o al menos ciertos criterios como antigüedad o trayectoria.
Un cierto enfado que impone un cambio en las negociaciones que ahora se llevarán a cabo a través de los órganos oficiales de IVIL.
Ahora toca al PP y a Tomás Fole encajar sensibilidades tan diversas como las que se pueden encontrar en la familia del PP y de los independientes antaño liderados por Rivera Mallo.
Un “puzzle” difícil que el regidor conservador deberá solucionar en cuestión de días. Ese es el plazo que tiene. El plazo para presentar candidaturas se acaba el 20 de abril. Antes de eso, deberá recibir el visto bueno de la dirección del PP.
Todas las previsiones apuntan a que la candidatura se presentará públicamente durante este fin de semana, por lo que esperan días de vértigo para la centroderecha vilagarciana.