11º-26º
viernes | 19 abril | 2024
El trabajo intenso de doce personas que, desde diciembre, forman parte del Obradoiro de Medio Ambiente de Vilagarcía se ha dejado notar, y mucho, en las inmediaciones del parque Valdés Bermejo. Los operarios en prácticas, que llevan visitando esta zona de forma periódica desde el mes de febrero, han hecho un auténtico lavado de cara a un enclave desconocido para muchos y que constituye el pulmón verde de la ciudad o, como bromeaba el alcalde Tomás Fole, el “Central Park vilagarciano”.
El regidor conservador y la edil de Traballo, Elena Suárez, visitaron ayer a los alumnos del taller que han sido los artífices del cambio. Y es que la actuación ha permitido retirar árboles y limpiar partes que no se adecentaban desde hacía años y eso se nota. Hasta el momento son los operarios municipales los que, dentro del circuito que tienen de parques y jardines, realizan la limpieza y el mantenimiento del Valdés Bermejo (también conocido como Castriño). Sin embargo el propio alcalde reconocía ayer que esta zona requiere de una atención específica y que es un punto que debe tenerse en cuenta a partir de ahora.
lista de actuaciones
Los operarios del Obradoiro de Emprego llevan desde febrero realizando trabajos en exclusiva en este entorno. Entre las actuaciones que desarrollaron están la de recoger basura (prácticamente todos los días), recortar el césped y podar los árboles.
Los operarios retiraron, de hecho, los restos de unos árboles que se habían desprendido y derrumbado sobre el lago central del Valdés Bermejo en las riadas del 2006. Además, se procedió a la plantación de cinco especies nuevas: Un acebo, tres robles americanos y un alerce que fue sustraído hace dos semanas.
Las actuaciones más importantes se centraron en el entorno del lago. Se perfiló la limpieza de las escaleras aledañas y se dragó el riachuelo para limpar los fondos y retirar la capa de hierba verde que la cubría. Eso sí, respetando la fauna existente.
En la zona del palomar se procedió al desbroce, rastrillado y poda de árboles y setos. Además se limpió el talud de forma manual usando arneses, limpiando la piedra y recuperando la estructura.
Todos los trabajos se realizaron en colaboración con los operarios municipales que conocen muy bien las características de este emblemático lugar.
darlo a conocer
El alcalde señaló que “era una buena oportunidad para recuperarlo y, sobre todo, para darle un impulso y que se conozca sobre todo entre los vilagarcianos”. El regidor conservador manifestó que “cuanto más cuidado esté este entorno, más se usará y también servirá como joya a vender para los turistas”.
Fole lamentó que “muchos vilagarcianos ni siquiera conozcan este entorno y que no sepan que existe una entrada por la parte del convento de Vista Alegre. Eso tiene que cambiar. Tenemos que potenciar lo que tenemos y darnos a conocer donde sea”.
De todos modos, el gobierno local se marca como principal objetivo al vilagarciano. “Si los de aquí lo conocen ya van a promocionarlo fuera y no hay mejor publicidad que la del boca a boca”.
