Ravella supervisa la colocación del cruceiro de Rúa Nova

La concejala de Obras, Ana Granja, supervisó ayer los trabajos de colocación del emblemático cruceiro de Rúa Nova. Los operarios iniciaron ayer la colocación de una estructura que fue rehabilitada por la Escola de Canteiros de la Diputación. Cabe recordar que ha sido después de muchos años cuando esta estructura volverá a lucir entre los límites del ayuntamiento de Vilagarcía y de Vilanova. El coste de la actuación corrió a cargo de las arcas municipales de la capital arousana.
La idea es que muy pronto este entorno recupere su característica imagen después de que, hace ahora tres años, un vehículo tirara la estructura causando serios daños que hicieron temer por su pérdida.
El principal motivo de los retrasos en la restauración del cruceiro fue el quién tenía que hacerse cargo del coste de la misma. Ante el desacuerdo con la compañía aseguradora del vehículo que causó los daños el gobierno local decidió recurrir a la Justicia por una banda y, por otra, no esperar más a asumir esos gastos mientras que los jueces no se pronuncian, presumiblemente a favor de la administración local.
El cruceiro ahora rehabilitado forma parte del conjunto del pazo de Rúa Nova, declarado monumento nacional desde el año 1976, y ligado a la familia de Ramón María del Valle-Inclán, que lo cita en más de una obra. El pazo tiene su origen en una fortaleza medieval que se convirtió en casa-torre entre finales del siglo XVII y principios del XVIII, fechas en tres las que también se sitúa la citada estructura.
El cruceiro está ubicado justo entre los límites de la parroquia vilagarciana de Sobrán y la vilanovesa de András y fue motivo de discusión en más de una sesión plenaria.