Reportaje | Campeones gallegos de las matemáticas “útiles”

Ana Cheng, Natalia Portela y Gonzalo Rodríguez son los campeones gallegos de las matemáticas útiles, que son las mismas que las matemáticas de toda la vida. Y es que estos estudiantes de sexto de Primaria del Colegio Filipenses han conseguido semejante título en un certamen que precisamente busca la divulgación de una de las materias menos populares de las aulas como lo que es: una disciplina necesaria y práctica para la vida cotidiana. A estos tres no se le puede engañar ni con la vuelta de la compra y pueden calcular en tiempo récord la distancia recorrida por un pájaro entre dos puntos señalados en un mapa de la ciudad de A Coruña, por ejemplo, equipados únicamente con sus conocimientos, una calculadora y su poderosa lógica; “es nuestro fuerte”, cuenta Gonzalo, de 11 años. 

El certamen se llama “Rebumbio Matemático” y sus diferentes fases se desarrollaron bajo la organización de la Asociación Galega de Profesores de Educación Matemática. En cada una, los niños de Filipenses fueron resolviendo los problemas propuestos que, más que desarrollar complicadas operaciones, requerían encontrar la fórmula adecuada par alcanzar la solución. Bajo la batuta de su profe, Anabel Buceta, y su técnica de trabajo en equipo, fueron superando las pruebas hasta alzarse con el título autonómico y ahora van a por el nacional. Por primera vez en la historia del concurso, se celebrará una fase con equipos llegados de diferentes partes de España. Será entre el 18 y el 20 en la ciudad de Melilla y el equipo reconoce que está “un poco nervioso”, añadió Ana, que ya ha cumplido los 12 y calificó de “emocionante” la consecución de todos estos objetivos. Y es que “es la primera vez que gana el cole”, explicó. Con todo, Buceta expuso que el objetivo era ahora es que disfruten de la experiencia de la convivencia con otros colegios y, sobre todo, divulgar el objetivo primerísimo de la participación de Filipenses en este certamen, que “las matemáticas se vean como lo que son, una herramienta para nuestra vida cotidiana”. Además se fomentan valores como el trabajo en equipo y sirve también como ejercicio para plantear verbalmente ideas porque la exposición también puntúa, según los escolares.