Un triste lunes, de un verano que no acaba de afincar, se llevó la sonrisa luchadora de Isabel Sánchez Torres. La conocida vilagarciana falleció hace unas horas y sus restos están siendo velados en el Tanatorio Arosa.
Mujer culta y comprometida, fue siempre cuidadadora de la belleza y de la conversación. Ambas podían encontrarse allá donde estuviera Isabel, cuya sensibilidad dedicó también a luchar contra cualquier injusticia.
Durante muchos años tuvo un comercio de enmarcación, lo que le llevó a la directiva de Zona Aberta. Más allá de eso, siempre tuvo manos para prestar a una causa que precisase de su sentir de la justicia y de un carácter exento de cinismo o egoísmo que llevase a doblegarse.
Enfrentó el cáncer sin negarle el nombre y sonrió mientras hubo fuerzas, con esa dulzura que irradiaba. Precisamente ahora, en tiempos en los que la luz se cotiza alto, Isabel cierra los ojos y se despide de esa Vilagarcía que tanto sorbió. En un lunes triste, de un verano que no acaba de afincar.